Por Javier Claudio
Claridades. – Si como ciudadanos tuviéramos mayor participación en las actividades de Gobierno, tendríamos sin duda un panorama justo y de mayor responsabilidad. Al menos de esto ya muestra visión el alcalde Enrique Rivas Cuéllar, al iniciar el proyecto ejecutivo que creará la Torre del World Trade Center (WTC) al darle involucramiento a la ciudadanía, para certeza en su seguimiento y conclusión. Esto es que justamente después de acabar su administración no se trunque por celos políticos.
Aclarando. – La Torre WTC estará ubicada cerca de la ribera del río Bravo, será junto con el Puente III un vistoso ícono del comercio mundial con rostro de frente hacia los Estados Unidos. El proyecto ya tiene toda la intervención del Grupo Desarrolladores de León, Guanajuato y adjunto contará con un hotel para turismo de negocios y un Centro de Convenciones, bajo la autorización y supervisión del Gobierno del Estado.
Clarín. – La estrategia de Rivas Cuéllar al ciudadanizar este llamado “proyecto tractor” que dará a luz el edificio propio del WTC, asegura así la no interrupción de la ambiciosa obra por decisión o ajuste del gobierno siguiente de cualquier partido político, pues además tendrá como candado adicional que el Municipio sólo aportará el 20 por ciento del total de la inversión y así dejar la mayor parte la aportación para este detonante del comercio internacional en manos de la Iniciativa Privada.
Claro que sí. – Para quien preguntó; Surge desde las entrañas del Gobierno del Estado que fue a principios del 2015 cuando Horacio Garza enarboló la solicitud ante el Gobierno del Estado para que fuera devuelto a Nuevo Laredo el Fideicomiso del Puente III por razones justas que van desde el derecho de propiedad hasta el excelente manejo que ha dejado beneficios hasta al país. Gran sorpresa, cuando el entonces gobernador Egidio Torre, decidió devolverlo y según sólo sería cuestión del finiquito legal.
Clarificando. – La prolongada gestión de devolución, sólo dependía de algunos acuerdos de Egidio con el entonces alcalde Carlos Canturosas, quien únicamente tenía como tarea ejercer la acción para alcanzar lo que “de palabra sería devuelto”. Hasta el último minuto, Egidio argumentó que Canturosas tuvo el acercamiento que esto merecía y finalmente diluyó. Hoy será más difícil con el actual gobernador panista, Francisco Javier Cabeza de Vaca, quien enrocó ya el Fideicomiso con Reynosa.
Claro que no. – Es evidente el alejamiento del Fideicomiso del Puente III, aún con el derecho que se tiene por el costo que asumió Nuevo Laredo para crearlo, pero que sin embargo lo han esfumado intereses políticos. Deben aplicarse nuevas estrategias para velar por el manejo de esos recursos y esto sería que si bien nos ganaron la jugada al dejarlo en manos de Reynosa, bien se podría luchar por “ciudadanizar” el Comité Técnico, al proponer que al menos sean de Nuevo Laredo sus integrantes. ¿O no?
Claroscuro. – Un trabajo con inteligencia, en equipo y en comunión, haría real la propuesta de Horacio Garza Garza, esto es que al ciudadanizar el Fideicomiso, con mayor facilidad se podría transparentar el manejo de los generosos recursos provenientes de los aforos. Ir más allá sería encaminarlo al beneficio de los neolaredenses, al crear un rubro que permita que un porcentaje de los ingresos sea para becar estudiantes y apoyar las titulaciones de profesionistas de escasos recursos.
Sabía usted que. – Si la operación del Puente III del Comercio Mundial permite aportar la mayor parte del IVA al país por concepto de comercio internacional, sin olvidar que yergue como la única obra autofinanciable de Tamaulipas, porque entonces no encaminar parte de esa serie de beneficios hacia Nuevo Laredo y qué mejor sería hacia las futuras generaciones y así apostarle de otra manera al desarrollo y mejor vida de nuestra ciudad. Cuestión de voluntad política y nada más.