
“No sabemos qué es peor: los hoyos que aparecen solos o los que deja la Comapa”; Vecino de la colonia Lázaro Cárdenas
Afectada por una ola de socavones y un caótico manejo de obras públicas por parte de la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (COMAPA), Ciudad Madero enfrenta una crisis de infraestructura que tiene a sus habitantes al límite.
Especial / LA RED DE ALTAMIRA
MADERO. — Afectada por una ola de socavones y un caótico manejo de obras públicas por parte de la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (COMAPA), Ciudad Madero enfrenta una crisis de infraestructura que tiene a sus habitantes al límite.
En lo que va del mes, se han reportado varios hundimientos como en la calle Niños Héroes en la colonia Lázaro Cárdenas, El polvorín y la colonia 20 de noviembre, donde vecinos aseguran que el suelo simplemente “se abre” sin previo aviso. A ello se suman las obras inconclusas o mal señalizadas de COMAPA, que han convertido calles principales en verdaderos campos de obstáculos.
“No sabemos qué es peor: los hoyos que aparecen solos o los que deja la Comapa”, dice con frustración Manuel Treviño, Vecino de la Colonia Lázaro Cardenas.
El problema, según especialistas, se ha agravado por la antigüedad de las redes de drenaje y agua potable, muchas de las cuales llevan décadas sin ser reemplazadas. Cada intervención de la COMAPA para reparar fugas o colapsos suele desencadenar nuevos daños, y los trabajos, lejos de ser una solución, a menudo generan más caos vial, filtraciones o hundimientos.
La ciudadanía acusa una falta de planeación y coordinación entre dependencias, así como un nulo seguimiento a las reparaciones. En redes sociales, se multiplican las denuncias y fotografías de calles abiertas, maquinaria abandonada y autos atrapados en baches o socavones.
“Nos prometieron obras de mejora, pero nos dejaron con calles intransitables, banquetas rotas y sin agua”, reclamó Elena Morales, vecina de la colonia Niños Héroes
Ante la presión social, autoridades municipales han exigido a la COMAPA acelerar los trabajos y dar explicaciones claras sobre los constantes colapsos. Sin embargo, el organismo operador argumenta que el problema es estructural y que requiere mayor inversión estatal y federal para renovar las redes por completo.
Mientras tanto, Ciudad Madero sigue tambaleándose entre socavones que amenazan viviendas y obras que colapsan el tránsito. Para muchos, la ciudad está al borde del colapso, no por un desastre natural, sino por la suma de omisiones y negligencias.