Arturo Rosas H. / LA RED DE ALTAMIRA
TAMAULIPAS.- Tamaulipas se pronunció a favor de que la Cámara de Diputados fije un presupuesto de egresos por 90 mil millones de pesos para solucionar los problemas de agua potable, drenaje, saneamiento, conducciones de canales de riegos y terminación de presas que entran dentro de la infraestructura hidráulica.
La propuesta se emitió durante un encuentro con el presidente de la Comisión de Recursos Hidráulicos, Agua Potable y Saneamiento, Feliciano Flores Anguiano.
Junto con el director general de la Comisión Estatal del Agua de Tamaulipas, Luis Javier Pinto Covarrubias, en conferencia de prensa se dio a conocer que el Ejecutivo Federal proyecta un gasto en el 2020 de al menos 20 mil millones y se requieren entre 60 y 90 mil millones de pesos para modernizar la infraestructura hidráulica.
Además, se expuso, se requiere inversión del gobierno e iniciativa privada, la cual requiere certidumbre jurídica y garantías para invertir, sin que sea sinónimo de privatización.
Durante la Convención Nacional en defensa de un presupuesto digno para el sector hídrico 2020, dijo que se presentará en el pleno lo que determinó el Senado respecto al impuesto al agua, especialmente para riego, ya ha quedado modificado.
Agradeció la participación de los usuarios de riego, organismos operadores de agua potable y expertos en la materia quienes plantearon sus propuestas.
Quintín Suárez Andujo, presidente de la Asociación Nacional de Usuarios de Riego, que encabeza a más de 580 mil concesionarios, aclaró que éstos son los que subsidian al Gobierno Federal y no al revés.
Desde 1992 se les entregó la infraestructura hidroagrícola en ruinas y con sus propios recursos la manejan y han logrado hacerla eficiente. Pese a ello, “se castiga con menor presupuesto a la Comisión Nacional del Agua para 2020, y el cobro por el agua para producir alimentos es aberrante; sería un golpe que aniquilaría al campo mexicano”.
El presidente de la Asociación Nacional de Empresas de Agua Potable y Saneamiento, Arturo Palma Carro, criticó el recorte de más de 31 por ciento para generar agua potable. Los más de dos mil organismos operadores del líquido pagan altas tarifas eléctricas, con aumentos de entre 40 a 120 por ciento al año, que dañan 60 por ciento los costos de producción y recaudan 48 millones de pesos, mientras que cinco empresas embotelladoras venden 63 mil millones de pesos.