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OTRAS YA SUBIERON SUS PRECIOS
Así lo informó Nicolás Berumen Ávalos, coordinador de la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios, la COEPRIS que corresponde a Tampico y Ciudad Madero, “Seguimos haciendo verificaciones, han cerrado dos purificadoras nada más en Tampico, pero es principalmente porque no hay agua” reveló.
PILAR DANTÉS / LA RED DE ALTAMIRA
TAMPICO.- Ante la crisis por el agua que enfrenta la zona conurbada sur, al menos dos purificadoras ubicadas al norte de Tampico han cerrado sus puertas; otras continúan prestando el servicio, pero han elevado sus precios al público debido a la contingencia.
Así lo informó Nicolás Berumen Ávalos, coordinador de la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios, la COEPRIS que corresponde a Tampico y Ciudad Madero.
“Seguimos haciendo verificaciones… han cerrado dos purificadoras nada más en Tampico, pero es principalmente porque no hay agua” reveló.
El funcionario dio a conocer que ante el desabasto del vital líquido que ha generado que el agua salga de los grifos con sedimentos, la Coepris ha intensificado las verificaciones.
Mencionó que mantienen vigilancia constante en la distribución del recurso para que confirmar que cumple con las normas sanitarias, pues de lo contrario, la ciudadanía enfrenta diversos peligros.
“El riesgo que corre la población es que nos quedemos sin agua y cause caos. A través de trasvases del Tamesí es ir restableciendo el vital líquido a la población de Tampico y Ciudad Madero y nosotros estamos haciendo nuestra función: que el agua cumpla con los límites del cloro residual para garantizar la salud de las personas porque sería una gran cantidad de personas que podrían afrontar enfermedades gastrointestinales”
Berúmen Ávalos reiteró que la dependencia a su cargo verifica que las purificadoras de Tampico y Ciudad Madero den el servicio a la población bajo los lineamientos sanitarios establecidos por la autoridad.
Con el propósito de que no se distribuya con sedimentos y que el cloro residual sea el adecuado para prevenir enfermedades gastrointestinales que pudieran desencadenar una epidemia.