PERIÓDICO LA RED DE ALTAMIRA #Opinión
Mario Vargas Suárez
Antes de iniciar el tema central, permítame el lector justificar la ausencia de este espacio por un poco más de dos semanas que, básicamente sirvieron para un cambio radical de actividades con motivo de las vacaciones veraniegas de este 2017.
Además, con un año más de vida, me reintegro a esta actividad periodística con el mismo profesionalismo de siempre en este naciente agosto.
Con el hábito en la escritura apasionante de esta columna, le comento que hay muchas temáticas que provocan reflexiones internacionales como el caso de la dictadura en Venezuela donde el ‘chavismo’, en la versión de Nicolás Maduro, toma dimensiones y la intervención más directa de Norteamérica y la misma Unión Europea.
En temas locales también hay una variedad de episodios, como el problema de la Oficina Fiscal del Estado que, desde antes de salir de vacaciones, no han podido solucionar la expedición de licencias para conducir vehículos automotores, ya que explican, al cambiar de formato el sistema de cómputo no reconoce datos ello impide imprimir los plásticos de identificación, conocidos como licencias… aunque ello no impide el cobro de los derechos de expedición.
Pese a las temáticas varias, me parece que existe una que bien pudiera titularse ‘La Doble Cara’, o quizá ‘Imprecisiones’ o tal vez ‘Doble Moral’ o ‘Los discursos de aquí y de allá’.
El título es lo de menos, porque lo demás es la contradicción, ahora viral en los medios y en las redes sociales, con los videos presidenciales de México y Estados Unidos en relación a la política migratoria de los vecinos norteños.
Este nuevo capítulo de las relaciones México-EU, empezó el lunes pasado cuando el gobierno de México negó que el presidente Enrique Peña Nieto haya hablado recientemente por teléfono con su homólogo gringo, contradiciendo las declaraciones del neoyorkino, jefe de la Casa Blanca.
Donald Trump expresó que el mandatario mexicano “…me llamó, dijo que muy poca gente está cruzando (ilegalmente) en su frontera sur porque saben que no podrán atravesar nuestra frontera”.
Las declaraciones de Trump, las hizo este lunes mientras elogiaba a su nuevo jefe de gabinete, John Kelly, quien antes estuvo como titular del Departamento de Seguridad Nacional.
El presidente gringo calificó la designación como ‘el máximo halago’ al desempeño de Kelly en su tarea de impedir la inmigración a Estados Unidos desde México, recalcó el magnate.
Sin embargo, la cancillería mexicana aseguró en un comunicado de prensa que “Peña Nieto no ha sostenido recientemente comunicación telefónica con el presidente Donald Trump”.
El comunicado oficial de la Secretaría de Relaciones Exteriores hace alusión al encuentro entre ambos mandatarios el 7 de julio durante la cumbre del G20 en Hamburgo, Alemania, donde “el tema de migración fue abordado” y Peña Nieto “compartió” algunas cifras, explicó la cancillería.
El caso es que mientras el norteamericano Trump se jacta de la aceptación mexicana de su política migratoria, en nuestro país las autoridades federales niegan tal hecho. Luego entonces viene a la mente aquella cuestión que hizo viral la maestra Elba Esther Gordillo, entonces del SNTE, cuando dijo: ¿Usted le cree a Madrazo?… ¡Yo tampoco!”
La alusión a Elba Esther es por la incredulidad popular, que es válida, porque no es para menos el desmerecimiento que se han ganado a pulso algunos gobiernos, como en este caso el federal de Peña Nieto.
En el mismo tenor, también es válido el pensamiento sobre la soberbia del neoyorquino para desacreditar al de Atlacomulco, porque finalmente nos hemos percatado que desde antes de su llegada a Washington no tiene ningún interés en nuestro país, ni siquiera como vecino a quien supongo lo ve como al que hay que soportar.