LUPITA TORRES / LA RED DE ALTAMIRA
TAMPCIO.- La actividad económica que se encuentra prácticamente paralizada debido a la emergencia sanitaria por el Covid-19, ha provocado que un promedio de 300 trabajadores del volante haya tenido que devolver las unidades nuevas que adquirieron durante noviembre y diciembre del año pasado debido a que no han podido realizar el pago mensuales debido a la falta de recursos.
El Representante de la Unión de Bases y Concesionarios de Tamaulipas, Marín Flores Garrido, indicó que esta pandemia los ha golpeado mucho en la cuestión económica al disminuir el movimiento de pasaje y ahora con estos dos días en que no trabajan les afecta más, pero que se privilegia la salud.
“Muchos de los concesionarios antes de que empezara esta pandemia en noviembre y diciembre, en enero todavía adquirimos unidades nuevas y estamos pasando por una situación difícil y muchos estamos negociando el pago de la mensualidad, porque ya se están atrasando ese pago”.
Manifestó que los bancos dan muy pocas facilidades de dos o tres meses y ahí están.
“Si se dan cuenta la mayoría de los carros son seminuevos y están pagando, y estamos ahora si bien ahorcados. Algunos compañeros incluso ya han regresado esas unidades, más de 300 unidades ya han tenido que regresar, porque el pago ahora es semanal y cuando no se paga el pago semanal se bloquea el carro y luego le exigen el pago de la semana atrasada”.
Dijo que ha habido poca flexibilidad, no como lo esperaban, por lo que esperan que disminuyan los casos de COVID-19 para poder trabajar y que se incremente también el flujo de pasaje.