Por Raúl Hernández Moreno
Al final, Daniel Peña dobló las manos y salió a las calles, a tocar puertas y encontrarse con la gente. Antes había dicho que no haría campaña en las calles porque eso no funcionaba.
Y también incluyó a las redes sociales, a pesar de que está convencido de que no votan. En cambio correligionarios como Horacio Seone, Ana Laura Anzaldúa, Jesús Valdez, Juanes Carrizales, entre otros, desde el primer día hicieron de las redes un foro para transmitir sus propuestas y comunicarse con los ciudadanos.
El ex alcalde le sigue apostando a las redes afectivas, las mismas en las que en el pasado reciente se estrellaron Verónica Flores, Carlos Montiel y Héctor Canales.
Con Montiel se llegó a tener una red afectiva de más de 220 mil promovidos y al final sus votos no pasaron de 50 mil. Fueron cuentas alegres. Y es que llenar hojas con nombres es muy fácil. El problema es tenerlos de verdad.
De acuerdo con el equipo de campaña de Daniel Peña con estas redes afectivas tienen apalabrados a más de 220 mil ciudadanos de los 303 mil probables electores registrados en Nuevo Laredo, aunque están convencidos de que con 80 mil votos ganan.
¿Serán cuentas alegres como las de la campaña de Montiel? Y es que hasta hay coincidencia en la cifra de promovidos.
Daniel Peña inició en el tercer lugar de las preferencias electorales y ahí sigue. La elección está a 23 días, tiempo extremadamente corto para remontar.
Daniel no debió exponerse a un descalabro, pero a los políticos no les gusta reflexionar. En el 2016 también cometió el error de exponer a su esposa Elsa Tamez al lanzarla como candidata a la diputación y con todo y su bien ganada y merecida fama de haber sido una súper presidenta del DIF, perdió.
Y es una lástima que esto ocurra. Daniel dejó buena imagen en su trienio como alcalde y no debió correr el riesgo de lanzarse a una aventura teniendo todo en contra.
Insistimos: queda poco tiempo para remontar. Igual y lo logra.
En otro tema, el candidato de Morena, Ramón Garza Barrios visitará la colonia Los Colorines esta noche y como no hay alumbrado público en el área a recorrer, llevará luminarias portátiles que entregara a los vecinos.
Por su parte, el candidato de la coalición PAN-PRD-MC, Enrique Rivas se reunió con comerciantes del Centro Histórico con quienes se comprometió a reactivar ese sector.
El Centro Histórico fue una zona pujante hasta los primeros años del siglo XXI. Con nostalgia recordamos cuando diariamente llegaban a Nuevo Laredo cientos de estadounidenses a visitar restaurantes como El Cadillac, Victoria 30-30, El Alicia; iban a refrescarse a los bares del primer cuadro; se paseaban en calandrias; recorrían las decenas de tiendas de artesanías, en las que se encontraban joyas artesanales de todos los rincones del país. ¡Que época!
Las autoridades y los comerciantes deben trabajar de la mano para reactivar el Centro. Algo se tiene que hacer.