GENERADA POR ESCOMBROS DE CONSTRUCCIÓN
El subsecretario de Medio Ambiente, en la Secretaría de Desarrollo Urbano, Karl Heinz Becker Hernández, reveló que el volumen de material de construcción que se desperdicia por ampliación, nueva edificación o remodelación de una obra, es una actividad que crece día con día, no solo en esta capital sino en otros municipios de la entidad.
Ramón Mendoza S. / LA RED DE ALTAMIRA
TAMAULIPAS. – La vivienda es una demanda social básica, misma que se ha venido incrementando de manera acelerada en Tamaulipas por el crecimiento natural de la población, pero a la par de este fenómeno han surgido “tiraderos” clandestinos de escombros de construcción.
El subsecretario de Medio Ambiente, en la Secretaría de Desarrollo Urbano, Karl Heinz Becker Hernández, reveló que el volumen de material de construcción que se desperdicia por ampliación, nueva edificación o remodelación de una obra, es una actividad que crece día con día, no solo en esta capital sino en otros municipios de la entidad.
En términos generales el estado enfrenta una grave situación por la contaminación que generan tiraderos clandestinos de desechos de diversos tipos, ya que no existen sitios autorizados donde puedan depositarse los residuos, lo que genera la proliferación de basureros irregulares que no son supervisados por las autoridades.
Incluso, reconoció que la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente está atada de manos, ya que no puede sancionar a particulares y empresas que tiran los desechos en sitios clandestinos, porque no hay lugares autorizados donde los puedan depositar.
De la misma forma las modificaciones del espacio, a través de obras de urbanización que se dan como parte inherente de todo proceso y crecimiento de cada ciudad para satisfacer demandas de la misma sociedad, repercute en la generación de una gran cantidad de desechos, ya sea por el mismo proceso de construcción o por demoliciones, de hecho, es la mayor fuente de residuos.
“Empresas privadas deben abrir y operar centros de transferencia de residuos, y por otro, gobiernos municipales también podrían tener centros de confinamiento”.
Mencionó que además de la contaminación por basureros clandestinos de llantas, también se han detectado tiraderos de todo tipo de residuos, incluso muy peligrosos para la salud de la población.
Dio a conocer que ha recibido reportes de “tiraderos de tarimas, de textiles, de otros residuos que no saben cómo disponer de ellos al final”.
Becker Hernández reconoció que “en la frontera hay un problema muy grande con las llantas, pero lo que más hemos detectado en Tamaulipas es el escombro”.
“Uno de ellos en Nuevo Laredo y otro que está el permiso tramitándose en Reynosa y nos hemos dado a la tarea en decirles a los particulares que busquen abrir este tipo de confinamientos de disposición final de escombros, porque la mayoría de los sitios irregulares empiezan por escombro y luego ahí avientan la llanta”.