Por Javier Claudio
- · – . Derriba Gobierno Federal documento legaloide que acreditaba importación
- · – . Paraliza la presunta legalización vehicular la Aduana por orden de CdMex
- · – . No hay albañiles y constructores recuren a mano de obra que devuelve EU
Claridades. – Cierto, predominó en incumplimientos el Tratado del Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), mayormente entre Estados Unidos y México, peor aún que la renegociación se ve con escaso optimismo, hasta parecer esfumarse el acuerdo original de aquél pacto en el rubro de vehículos, el que hablaba de dar paso este año a la libre importación de autos modelos 2019, tal y como se tenía previsto de manera tripartita. Ahora sí que cuantos de pescadores que arrullan el mar.
Aclarando. – En materia de importación de vehículos usados se han cerrado las puertas a la importación al crear una serie de trabas que dejan fuera del alcance esta operación, no obstante que son más baratos de lado americano las unidades motrices. Esta medida hacendaria, calificada como marrullera, ha desplomado hasta en un 85 por ciento estas importaciones, provocando afectación en la economía fronteriza. El cierre propició amparos y ayer cayó el último que operaba aquí y en la frontera de Mexicali.
Claro que sí. – Poco tiempo les duró a las empresas Comercializadora Micro Automotriz de Nuevo Laredo, Tamaulipas, y Automotores 2017, asentada en Mexicali, Baja California, pues fueron acusadas de importar vehículos desde Estados Unidos de manera ilegal, corrompiendo al personal de la Aduana. El aparato de gobierno federal se les vino encima, se les el amparo y quedan suspendidas más de 30 importaciones de este tipo, solamente este fin de semana, esto luego de recibir pitazo desde Mexicali.
Clarín. – Según el TLCAN, la importación de vehículos americanos usados sería gradual en todos sus modelos sin traba alguna pues el acuerdo tiene contemplado abrir el paso total en el 2019 a todos los años-modelo que entonces estaría vigente, pero no se ha cumplido y sí por el contrario han aumentado las condiciones, concentradas en su mayoría en papeleo y la elevación de costos de trámites hasta en un 50 por ciento. Cierto, la presión de ensambladoras mexicanas ha sido severa, hasta el momento.
Claroscuro. – Mientras tanto el tutelaje del Gobierno Federal a través del SAT sigue siendo también severo, al urdir constantemente reglas a la importación de vehículos usados las que según son para agilizar y aumentar en número este tipo de operaciones. No obstante, tras esto perversamente se aplicaba traba como es el exigir el “certificado de origen” como requisito para la importación definitiva y el que finalmente y para asombro se logró, aunque de manera irregular y bajo el consabido riesgo.
Clarificando. – Los trabajadores de obra no dan abasto a la construcción existente en la ciudad y tan es así que algunas empresas constructoras ya están trayendo albañiles de Anáhuac y Sabinas. Otra instancia son los migrantes, donde los constructores han encontrado excelente mano de obra calificada, esa que es desdén de las autoridades de gobierno de Estados Unidos. Así salvamos la obra, asegura José Cruz de la Luz Paz, presidente de la Asociación de Constructores de Nuevo Laredo.
Claro que no. – La problemática no para ahí, pues si bien las empresas constructoras salvan sus necesidades de personal, este solicita su pago a destajo debido a que son fuereños y en cualquier momento retornan a sus lugares de origen o bien les llaman de Estados Unidos para darles respuesta sobre la solicitud de asilo. Aquí el único perdedor es la Subadministración del Seguro Social pues el estado incierto de contratación este tipo de trabajador les impide ser dados de alta.
Sabía usted que. – De acuerdo a información de Hugo González, director de la Corporación para el Desarrollo Fronterizo (Codefront) de Nuevo León, adjunto al Puente Colombia se tiene una estación cuarentenaria que funciona como un puerto de entrada al país vecino para el ganado exportado desde México, de la que se estima salen hasta algunas 110 mil cabezas de ganado anualmente, cifra que es fortalecida con hatos de Tamaulipas.