CON EL ARGUMENTO DE EMERGENCIA SANITARIA
A través de Guillermo N, los primeros señalaron a Plásticos Industriales de Tampico (PITSA) que mandó a casa a 40 obreros con el argumento de la emergencia sanitaria por el coronavirus, el problema fue que no se les otorgó ningún tipo de prestación o apoyo de retiro, tras el tiempo que estuvieron empleados en el mencionado lugar.
LUPITA TORRES / LA RED DE ALTAMIRA
TAMPICO.- Para denunciar que fueron dados de baja sin finiquito y para solicitar el apoyo de las autoridades, un grupo de trabajadores de una empresa de plásticos y otro de prestadores de servicio en bares y cantinas de la localidad, se plantaron en el centro de la ciudad con la intención de encontrar solución a su conflicto por el Covid-19 ahora que la Junta de Conciliación está cerrada.
A través de Guillermo N, los primeros señalaron a Plásticos Industriales de Tampico (PITSA) que mandó a casa a 40 obreros con el argumento de la emergencia sanitaria por el coronavirus, el problema fue que no se les otorgó ningún tipo de prestación o apoyo de retiro, tras el tiempo que estuvieron empleados en el mencionado lugar.
El grupo de obreros dio a conocer que se trata de una empresa enfocada a la construcción de contenedores industriales, de darlos de baja y desampararlos durante la contingencia y buscan algún apoyo toda vez que las oficinas de Conciliación y Arbitraje se encuentra cerradas y aunque están conscientes de que se trata de empleos transitorios, consideran que “les dieron una patada” con el argumento de la emergencia sanitaria.
Otros que también denunciaron su situación fueron los trabajadores de bares y centros nocturnos de la ciudad, un aproximado de 200 meseros y otros con diferentes actividades relativas a dichos establecimientos que piden apoyo al Gobierno Municipal y federal para llevar sustento a sus familias.
Fue Manuel N quien en representación del grupo de personas afectadas por esta situación, indicó que sólo quieren ser escuchados por las autoridades en cuanto a sus peticiones porque el problema es económico y arrastra a quienes dependen de ellos.
“Somos de la zona centro, todos somos trabajadores que vivimos al día y estamos padeciendo, porque tenemos 20 días sin trabajar… les brindaron apoyo a los boleros y queremos ver si a nosotros nos quieren ayudar… también tenemos hijos pequeños y necesitan alimento”, indicó.
Indicaron que no tienen prestaciones, que viven al día y por esa razón fue que el cierre de sus fuentes de empleo los agarró desprevenidos. Agradecieron una despensa que hace días les proporcionó el DIF aunque requieren también suministros como gas y agua, entre otros artículos de primera necesidad.