
Pilar Dantés / LA RED DE ALTAMIRA
ZONA CONURBADA. – Con palmas en mano y espíritu festivo, cientos de fieles se congregaron este Domingo de Ramos en la Catedral de Tampico para dar inicio a la Semana Santa. La ceremonia, encabezada por el clero local, fue un llamado a la reflexión y la paz en medio de una jornada marcada tanto por la devoción como por la presencia de familias que ya disfrutan de sus vacaciones en la zona sur de Tamaulipas.
Alrededor de la Plaza de Armas, la vendimia no se hizo esperar: desde puestos de golosinas y bebidas, sin faltar por supuesto las artesanías religiosas y palmas benditas adornadas, el colorido ambiente convivió con la solemnidad litúrgica.
Comerciantes aprovecharon el flujo constante de personas para ofrecer sus productos, en una mezcla de fervor religioso y actividad económica que caracteriza estas fechas.
Entre los asistentes también destacó la presencia del grupo de oración 40 Días por la Vida, que con pancartas y rezos, expresaron su postura en contra del aborto. La manifestación, pacífica y cargada de mensajes provida, generó diversas reacciones entre los presentes, abriendo un espacio de debate en medio de una jornada que suele girar en torno a la unidad espiritual.
La fe de los tampiqueños se mantuvo como hilo conductor del día: ya sea en la misa, al adquirir una palma bendita, o al rezar en silencio, la comunidad dio muestra de una tradición que trasciende generaciones.
Para muchos, este inicio de la Semana Santa es más que un rito; es una oportunidad para renovar la esperanza, reflexionar y reconectarse con sus creencias, aun en un entorno turístico cada vez más concurrido.