AVANZA LA EROSIÓN COSTERA
La erosión natural por el oleaje se ha registrado desde el año 1985, en el frente marítimo del puerto industrial de Altamira, el cual se debe a la modificación de los patrones de corrientes costeras ocasionadas por la construcción de los rompeolas del puerto a partir de 1982.
ESPECIAL / LA RED DE ALTAMIRA
ALTAMIRA.- El avance de la erosión costera en Altamira, en especial en la zona conocida como el cordón litoral, está generando la desaparición de esta barrera natural que ayuda a evitar que el agua del mar ingrese a las marismas y lagunas de agua dulce. Lo que aumenta el riesgo de salinidad en el líquido para consumo, daño en el ecosistema y peligro de inundaciones.
El cordón litoral está ubicado en la parte sur de las escolleras del puerto industrial de Altamira. Justo del lado derecho se encuentran las marismas y del lado izquierdo está el Golfo de México.
La erosión natural por el oleaje se ha registrado desde el año 1985, en el frente marítimo del puerto industrial de Altamira. Mismo que se debe a la modificación de los patrones de corrientes costeras ocasionadas por la construcción de los rompeolas del puerto a partir de 1982.
Esta situación ha motivado a una serie de recomendaciones para abordar la erosión del cordón litoral de Altamira.
Especialistas han detectado que el cordón litoral cuenta con una franja muy corta, llegando a tener solo 20 metros en su parte más angosta. Incluso se ha perdido su pronunciada pendiente y ahora está al nivel de las lagunas de marismas y el mar. Mismo que puede convertirse en un problema en caso de un evento hidrometeorológico de gran magnitud, como un huracán de categoría 4 según la escala de Saffir-Simpson.
Al respecto Alejandro Villa Arce, especialista en medio ambiente y cambio climático, confirmó que se ha observado un proceso de erosión que ha afectado hasta 10 kilómetros al sur de los espigones en Altamira.
Y es que según los estudios del finado experto Sergio Jiménez, se estima que se han perdido entre 6 y 11 metros por año del cordón litoral en esa zona. Estos sedimentos se han desplazado tierra adentro, lo que aumenta la gravedad de la situación del sitio.
El conflicto natural generado por la erosión ha provocado un impacto en la flora y fauna de la zona. Ya que se ha detectado afectación en el manglar, provocando que esté muriendo debido a la alta salinidad.
De igual manera se han registrado disminuciones en la presencia de aves, como la hereta y la espátula rosa, que migran a la zona.
Sin embargo, los efectos podrían ser más devastadores para la zonas pobladas del municipio y otros puntos. Donde se pueden registrar inundaciones y niveles de salinidad perjudiciales para los organismos en las áreas más bajas de Tampico y Ciudad Madero.
Existe también el riesgo de que desaparezcan las marismas, que son un área natural y una zona de biodiversidad importante, especialmente para las aves.
El impacto en la mancha urbana sería inevitable, ya que zonas como Tampico y Madero, que son propensas a inundaciones, podrían verse afectadas por el rompimiento de la laguna, lo que resultaría en la inundación de los hogares de aproximadamente 60 mil personas.
Por ello, la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) ha propuesto la construcción de espigones utilizando sedimentos específicos para combatir la erosión. Por ello los especialistas consideraron que es crucial que ya se tomen cartas en el asunto antes de que el problema sea irreversible, situación que no tarda en suceder.