Primitivo López / LA RED DE ALTAMIRA
LAREDO, Texas.- El congresista federal texano Henry Cuellar y el senador estadounidense John Cornyn dirigieron una carta bipartidista al secretario interino de Seguridad Nacional, Chad Wolf, expresando su preocupación por las continuas restricciones de viaje en nuestros puertos de entrada del sur y exigiendo un plan para restaurar las operaciones normales.
La senadora Kyrsten Sinema, junto con los representantes estadounidenses Will Hurd, Vicente González, Michael McCaul y Ann Kirkpatrick, firman la carta.
Escribieron:
“Apreciamos plenamente el difícil equilibrio que el DHS debe lograr entre proteger a sus oficiales y al público contra el COVID-19 y facilitar las necesidades económicas y sociales de las comunidades fronterizas. Sin embargo, el DHS ha proporcionado poca información pública sobre cómo sopesó los costos y beneficios de estas restricciones de viaje extendidas. Nos preocupa que las filas más largas en los puertos de entrada y la imposibilidad de distanciarse socialmente en los carriles peatonales puedan aumentar el riesgo de propagación del COVID-19, y el DHS no ha proporcionado información suficiente para mostrar cómo están mitigando estos riesgos”.
“Además, el DHS no ha articulado públicamente un plan para regresar a las operaciones normales, ni ha establecido ningún punto de referencia que deba alcanzarse antes de que las restricciones de viaje se puedan relajar parcialmente o levantar por completo. Si bien entendemos que el DHS actualmente se ve obligado a adaptarse a una situación en constante cambio, los cuatro estados fronterizos del suroeste (Texas, Nuevo México, Arizona y California) han desarrollado planes de reapertura por etapas. El DHS debería desarrollar el mismo tipo de plan para brindar mejor a las comunidades locales una idea básica de qué esperar en los próximos meses”.
“Finalmente, el DHS no se ha comunicado adecuadamente con los gobiernos locales, las empresas y el público en general sobre las restricciones de viaje. Aunque CBP se ha involucrado en esfuerzos de alcance local, muchos de esos esfuerzos parecen haberse centrado en negocios esenciales”.
Los llamados negocios “no esenciales”, que comprenden partes críticas de las economías locales, a menudo no están informados acerca de por qué se han impuesto las restricciones y cuándo pueden levantarse.
La semana pasada, el congresista Cuellar envió una carta a los líderes de la Cámara, instándolos a establecer un programa para exámenes de salud mejorados de COVID-19 en los puertos de entrada terrestres (LPOE) en el próximo Paquete de ayuda de respuesta de emergencia COVID-19.
El programa permitiría al secretario del DHS utilizar asociaciones público-privadas para ayudar a proporcionar a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos el personal, el equipo, las pruebas y la experiencia médica necesarios para realizar estos exámenes de salud.
En septiembre, el congresista Cuellar celebró una conferencia de prensa para discutir su propuesta al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) que trabajaría para reducir o eliminar las restricciones a los viajes no esenciales y al mismo tiempo limitar la propagación del coronavirus en la frontera sur.
El DHS continúa ampliando las restricciones de viaje no esenciales, pero no ha proporcionado un plan para resolver el problema. Las continuas extensiones de 30 días de las restricciones de viaje prolongan la devastación económica en nuestras comunidades.