
Agustín García
- Alejandro Guevara se perfila como presidente del C.D.E del PRI
Vaya lío no solo judicial, sino también de percepción, en que se encuentran el futbolista y capitán de la Selección Nacional, Rafael Márquez Álvarez y el cantante grupero chiapaneco, Julión Álvarez Montelongo, luego de que el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, los exhibiera como prestanombres y lavadores de bandas de narcotraficantes.
Fue tanto el impacto de este señalamiento público que Rafa Márquez, este miércoles 9 de agosto se presentó ante los representantes de la Procuraduría General de la República, para responder a cualquier acusación en nuestro país, mientras que por su parte, Julión Álvarez Montelongo, a través de un video subido en redes sociales, menciona que este problema es generado por envidias y sin dar más detalles.
Para demostrar la seriedad de las investigaciones realizadas por las autoridades estadounidenses, éstas cancelaron la visa para ingresar como turistas o de trabajo a estos dos ídolos mexicanos, además de congelar cuentas bancarias y confiscar las empresas a su nombre que posean en Estados Unidos.
Para que usted estimado lector se dé una idea de la gravedad de las acusaciones, basta mencionar que apenas el lunes, la Presidencia de la República había publicado una fotografía en redes sociales, en donde aparecía Enrique Peña Nieto, Manuel Velasco, gobernador de Chiapas y el cantante Julión Álvarez, disfrutando en una pequeña embarcación en el cañón del Sumidero, pero al tronar esta noticia, de inmediato esa fotografía fue bajada y ya no se encuentra.
Aquí conviene señalar que dejar la fotografía subida por la Presidencia de la República, o como lo hicieron bajarla, cuando todos los medios informativos formales y redes sociales daban esta noticia bomba, demostraron que el Presidente de la República, no estaba enterado de las pesquisas que estaban realizando las autoridades estadounidenses, en donde se encontraba al cantante chiapaneco.
Esto demuestra que le sigue fallando al Gobierno de la República la capacidad de respuesta y el control de crisis, frente a situaciones emergentes, que por no tener información clasificada como lo es estar enterado de aquellos personajes, que si al menos no prestigian a la institución, cuando menos no le endilgan más desprestigio, al estar investigadas por autoridades de otros países.
Los cierto es que esta noticia causó un fuerte impacto emocional entre no pocos millones de mexicanos, que ante la crisis de credibilidad por la que atraviesan los gobernantes y representantes populares, buscan psicológicamente evadirse por aquellas personas que consideran un ejemplo, como son los deportistas y personajes sobresalientes del espectáculo, como lo son Rafael Márquez Álvarez y Julión Álvarez Montelongo.
Porque estos dos ídolos, principalmente Márquez se convirtió en un ícono del balompié por su exitosa participación en varios clubes de primera división del futbol europeo, pero principalmente en el Club Barcelona de España.
Junto con Márquez y Álvarez, en la lista negra publicada por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, a través de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés), aparecen otras 20 personas más que son señaladas como prestanombres y lavadores de dinero de Raúl Flores Hernández, además de 43 empresas ligados a dos cárteles mexicanos como lo son el de Sinaloa y el de Jalisco Nueva Generación.
No cabe duda que cuando empecé a ver la nueva serie producida por Netflix, llamada Osark, pensé que el lavado de dinero estaba muy alejado a la realidad, pero me di cuenta que este fenómeno es real y está más cerca de lo que pensamos, al grado de que personajes consideradas como glorias deportivas como Rafa Márquez o cantantes exitosos como Julión Álvarez, ahora son exhibidos y severamente cuestionados, bajo el señalamiento de prestar sus nombres y ayudar a blanquear dinero sucio.
Alejandro Guevara se perfila como presidente del C.D.E del PRI
Pasando a otro tema, diremos que luego de que el diputado federal y fuerte aspirante a dirigir al Comité Directivo Estatal del Partido Revolucionario Institucional, pidiera licencia para separarse de su cargo y tener tiempo para aplicarse en una campaña para convencer a los Consejeros de su Partido, surgieron las apuestas doble contra sencillo de que Alejandro Guevara se perfila para liderar el PRI Tamaulipas.
Si a ello sumamos que existe una tendencia generalizada entre quienes aspiran a la dirigencia estatal del tricolor, para consensar y existe la posibilidad de que haya un solo candidato de unidad, para ser elegido como presidente del CDE Tamaulipas, muchos piensan que podría ser Guevara Cobos.
Esta especie surge porque Guevara tiene relaciones tanto con la cúpula priísta, como en el Gobierno de la República, que facilitaría operar político-electoralmente, a través de enviados y programas para tratar de enderezar el barco priísta.
Sin embargo, existen otras persona que insisten que quien podría llegar a la dirigencia estatal es Sergio Guajardo Maldonado, por su evidente cercanía con Manlio Fabio Beltrones, quien al parecer, agarró su segundo aire y quiere subirse al barco de la oportunidad para convertirse en una opción de su partido y allanar hacia la candidatura a la Presidencia de la República.
Sin embargo, al parecer, esta última versión no deja de ser solo un sueño guajiro, porque Beltrones, al renunciar a la dirigencia nacional del PRI, luego de la debacle del año pasado, lo único que propició es dejar el timón a personas inexpertas y sin ningún interés en darle rumbo y dirección, propiciando una crisis interna y externa.