Armando Castillo Gutiérrez / LA RED DE ALTAMIRA
TAMAULIPAS.- A diferencia de años anteriores, el periodo de 40 días que comprende la canícula será más benevolente para este 2023, al pronosticarse lluvias para los próximos días, aparte de las registradas en municipios como Casas, Abasolo y parte de San Fernando.
De hecho, las sensaciones térmicas de hasta 55 grados que llegaron a registrarse en municipios como Nuevo Laredo y la región cañera de Ciudad Mante con las tres ondas de calor que se presentaron, difícilmente se volverán a registrar en lo que comprende la canícula, estableció Luis Gerardo González de la Fuente.
El coordinador de Protección Civil del Gobierno del Estado aclaró sin embargo que el calor se mantendrá desde que inició la canícula el pasado tres de julio al menos hasta mediados de agosto, aunque con temperaturas más benevolentes e incluso, con el registro de precipitaciones pluviales.
“Antiguamente el periodo de la canícula eran los 40 días más calientes del año por su temperatura, pero con el cambio climático hemos visto que ya no es así, sobre todo ahora que se presentaron las tres ondas de calor con sensaciones térmicas de hasta 55 grados Celsius”, refirió.
González de la Fuente dejó en claro que el valor va a seguir en algunos de los 40 días de la canícula, pero también hay el pronóstico de precipitaciones pluviales, haciendo más benevolente el clima.
“Las condiciones empiezan a mejorar pese a la canícula, no hemos superado los 40 grados centígrados en la mayor parte del Estado y contrario a ello, se registran vientos más agradables en Victoria y en otros municipios se han registrado lluvias”, sostuvo.
Por ello, consideró que el comportamiento en el periodo de la canícula se mantendrá caluroso, no a extremos de las ondas de calor, por eso es importante mantener las recomendaciones, entre estas no exponerse a los rayos del sol en un horario de once de la mañana a las 16:00 horas (cuatro de la tarde).
De igual forma, evitar las actividades físicas al aire libre, usar ropa clara y rehidratarse en forma constante, dado que situaciones como el golpe de calor, generalmente se registra cuando una persona lleva varios días sin consumir líquido.