Por Raúl Hernández Moreno
Quien quiera ser candidato independiente a la diputación federal deberá reunir un mínimo de 6237 firmas, equivalente al 2 por ciento de la lista nominal, con corte al 31 de agosto, que es de 313,626.
El Instituto Nacional Electoral acaba de publicar el número de firmas que deber reunir los aspirantes a independientes, en cada uno de los 300 distritos que hay en el país.
En el caso de Tamaulipas, en los 9 distritos se deben reunir las siguientes firmas: En el 1, las 6237; en el 2, 5,584, de una lista nominal de 279,174; en el 3, 5,923, de 296,115; en el 4, 6,074, de 303, 658; en el 5, 6,013, de 300,641.
En el 6, 5,516 de 275,754; en el 7, 5,821, de 291,022; en el 8, 5,883, de 294,116; en el 9, 5,882 de 294,097.
Estos son los números que necesitan los valientes – ¿o serán ingenuos?, ¿locos?, ¿soñadores?- que se lancen por una diputación independiente.
El consejo general del INE también aprobó los lineamientos para que los partidos prevengan, sancionen, reparen y erradiquen la violencia política contra las mujeres en razón de género.
Los candidatos tendrán que firmar un formato donde se establezca que no han sido condenados o sancionados por violencia familiar o por delitos de índole sexual.
Además, no podrán ser candidatos quienes hayan sido sancionados como deudores de la pensión alimenticia.
¡Bófanos! Si el INE se mete a fondo en este tema, se descartarán muchos aspirantes que no cumplen sus obligaciones con su familia. Qué bueno sería que estas medidas vayan más allá de un objetivo mediático porque quien no cumple con su familia, menos cumple con la sociedad.
En otro tema, al Presidente Andrés Manuel López Obrador se le hizo bolas el engrudo con la petición de 10 gobernadores que piden revisar el pacto fiscal. Abiertamente se niega a reunirse con ellos, con el pretexto de que se afectaría su imagen presidencial, la cual todos los días se deteriora durante las mañaneras. Además, para la historia quedó el antecedente de que López Obrador abrió un espacio en su agenda para recibir a la mamá del Chapo.
Los morenistas se han aliado con su Tlatoani y acusan a los gobernadores de querer separarse de México, en tanto que el Secretario de Hacienda, Arturo Herrera, menciona, aunque nadie se lo pregunto, que el actual pacto fiscal se aprobó en 2007, en el sexenio de Felipe Calderón, como si ese antecedente fuese suficiente para ya no revisarlo.
La realidad es que ningún Estado quiere separarse de México, los gobernadores piden más presupuesto y en el caso de Tamaulipas y Nuevo León citan que al primero la federación le regresa 14 centavos de cada peso que aporta y a Nuevo León 29 centavos de cada peso. Ambos estados han encontrado el respaldo de la sociedad civil, porque obviamente todos aspiramos a tener una mejor comunidad.
El 15 de diciembre es la fecha límite para aprobar el presupuesto federal del 2021, hasta ahora se contempla reducirle 750 millones de pesos a Tamaulipas, de una bolsa que este año rondó los 50 mil millones de pesos.
¿En qué terminará todo este asunto?