Por Raúl Hernández Moreno
El 2 de abril, en su mañanera, el Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que la crisis sanitaria y económica sería transitoria y se pavoneó de que “por eso vamos a salir fortalecidos, o sea, que nos vino esto como anillo al dedo para afianzar el propósito de la transformación”.
Ese día en México se registraban 50 muertos por Covid y 1,510 casos confirmados. Eran pocos muertos y quizá por eso a AMLO no le importaron los deudos de esos fallecidos, en aras de afianzar su proyecto político.
Del 2 de abril a la fecha, se han registrado 49,698 muertos y 456,100 casos positivos. Somos el tercer lugar mundial en muertos de Covid, por encima de países como Rusia, India y China, que tienen una población mucho mayor al nuestro.
Cuatro meses después de la desafortunada, cruel, insensible e inhumana declaración de que la crisis “nos vino como anillo al dedo”, es evidente que el Presidente sigue pensando lo mismo, pues no ha corregido su barbaridad. Ni lo va hacer. En vez de eso ofrece “honrar” su memoria, como si con eso comieran las viudas, huérfanos y demás deudos. Primero los desprecia y luego hace como que los valora.
Junto con la crisis sanitaria, la economía colapso. Durante cuatro meses la pandemia dejo sin ingresos a más de 10 millones de trabajadores informales y envió a las filas del desempleo a más de un millón de trabajadores formales.
Más de 17 mil millones de dólares salieron del país, se desplomó la inversión extranjera, cerraron más de 90 mil restaurantes.
Al final de este año, a los 52 millones de pobres se sumaran otros más, entre 6 y 12 millones, de acuerdo con especialistas. Seguramente eso alegra al Presidente, empeñado en que todos seamos pobres, además de que son clientes a los que va a atraer a su partido mediante la entrega de tortas y refrescos, transformados en apoyos clientelares.
Del Covid vamos a salir adelante, pero no será por obra y gracia de AMLO. Vamos a salir adelante, porque los mexicanos estamos acostumbrados a superar las crisis económicas y políticas y los desastres naturales.
En otro tema, es probable que el Secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Víctor Manuel Toledo se sume en los próximos días a la lista de funcionarios despedidos por la 4T.
Su delito es haber criticado a la 4T y decir que no existe y que no apoya los proyectos a favor del medio ambiente.
Este día AMLO dijo al respecto que en su administración hay libertad y que no existe el pensamiento único y después agregó: “Desde luego, yo soy el responsable del resultado final, yo soy el que al final decide, no son los secretarios los responsables de las decisiones, tiene que ser el presidente”.
Primero dice que en su gobierno no existe el pensamiento único y después dice que él toma las decisiones. Como un dictador, mejor que despida a todos los secretarios, para que los quiere de floreros.