Por Raúl Hernández Moreno
Todos los actores de Morena que aspiran a ser candidatos hablan de la necesidad de que se genere la unidad como ingrediente obligado para ganar las próximas elecciones. El problema es que la mayoría concibe la unidad pero en torno a ellos, no hacía los demás, y así no funciona la política.
Todos, desde Carmen Lilia Canturosas, Sergio Ojeda, Rogelio Soto, Gastón Herrera, Esther García, Marisela López Ramos, Jorge Valdez, Oscar Alarcón, Héctor Ponce, Heriberto y Ramón Cantú, absolutamente todos, quieren la unidad. Y todos tienen razón, el problema es cómo garantizarla, porque está comprobadísimo que desde el 2014 a la fecha la unidad en Morena es de saliva. Por eso, ese año, los grupos no permitieron que la señora Ninfa Deándar fuera dirigente del partido y en un descuido se impuso como líder a Gabino Carrillo.
Carrillo terminó desconocido y en el 2015 uno de los grupos, el de Estuardo Álvarez, terminó levantándole la mano a la candidata del PAN, Laura Zarate que para su mala suerte perdió la elección. Eran tiempos raros. Por un lado Estuardo Álvarez, Damián Soto, y otros más colaboraban con el alcalde Carlos Canturosas, en tanto que Oscar Alarcón y Héctor Ponce se enfrentaban a Canturosas y le solicitaban no remover el monumento a Los Fundadores.
En el 2016, Estuardo Álvarez terminó apoyando la campaña de Jorge Valdez para gobernador, bajo las siglas del PRD, lo que no fue obstáculo para regresar a Morena en el 2018.
En el 2019 se repitió lo de siempre y cada uno de los candidatos a diputados locales trabajó en su propio proyecto, a diferencia de los panistas que aprovechaban cualquier ocasión para reunirse y mandar un mensaje de unidad.
La unidad en Morena parece cosa imposible.
Mientras los morenos sigan riñendo entre sí le facilitan el trabajo al PAN que en este momento está inmerso en la realización de foros de consulta para diseñar la plataforma electoral 2021-2024.
El dirigente local del PAN, Ernesto Ferrara destacó que el partido es plural y cercano a la gente.
En Nuevo Laredo se planea realizar 60 foros y a nivel estatal ya están agendados 560, incluidos los que ya se efectuaron. Para el 2021 el PAN estatal aspira a retener y de ser posible incrementar, los 31 municipios, los 21 distritos locales y las 4 diputaciones federales. Hablar de un carro completo sonaría a demagogia, porque Tamaulipas no es para el PAN, lo que Coahuila es para el PRI.
El PAN es el partido a vencer y hasta ahora su rival más fuerte es el propio PAN. Si llegan fracturados a la elección se corre el riesgo de perder. Si conservan la unidad, le van a complicar la tarea a Morena.