Por Juan R. de la Sota
El reconocer la realidad es de sabios, de inteligentes, de astutos y de vivillos, por lo que el PRI y el PAN, deberían crear consensos, acuerdos, tratos y similares, para ganarle clientela electoral al partido Morena, porque si panistas y priistas se tiran a la hamaca los morenistas les ganarán la mayoría en el Congreso de Tamaulipas y hasta la gubernatura.
Los dirigentes priistas y panistas tendrían que hacer a un lado sus ideologías, rencores, envidas y diferencias para pactar una alianza entre el PRI y PAN, porque ambos en estos momentos se necesitan para dar la batalla electoral a Morena, pues en el caso de Tamaulipas muchos ciudadanos votarían por los candidatos morenistas y se puede comprobar con la realización de una encuesta.
Cesar García Coronado, será el próximo dirigente del PRI en Tamaulipas, de eso no hay duda, pues todo se encuentra pactado y listo para su arribo al liderazgo de este instituto político, al ser la persona que reúne el perfil idóneo para ocupar este puesto.
Cuenta con juventud, capacidad política, fuerza, aptitudes y buenas relaciones con la gente y la clase política.
A García Coronado, no lo pierdan de vista, será el priista que venga a darle oxigeno y a fortalecer al PRI, cuenta con el respaldo del priismo estatal y las relaciones con políticos de Tamaulipas y a nivel nacional para lograrlo.
Francisco Elizondo Salazar, dirigente estatal del PAN, tiene que abandonar su modorra para buscar esa unión legal de esfuerzos con el Revolucionario Institucional, para que vayan a la elección juntos, pues de no hacerlo y competir de manera individual difícilmente le ganarían a Morena.
Al PAN le conviene la alianza con el PRI, debe buscarla, porque no le convendría que el instituto político tricolor pacte una coalición con el partido Morena, dado que sumarían votos y le ganarían espacios de elección popular a Acción Nacional.
Reitero, el PRI y el PAN se ponen a chambear o el Partido Morena les seguirá quitando simpatizantes y votos.
Y no es que Morena sea un buen partido, al contrario es un instituto en el que impera el desorden, la envidia, la improductividad, el alejamiento hacia la gente, la soberbia y la desatención ciudadana.
Mantiene el apoyo ciudadano por la confianza que tienen en las promesas de Andrés Manuel López Obrador, Presidente de la República electo, quien si no cumple, su partido también será rechazado en las urnas electorales.
Cambiando de tema, el gobierno estatal simplemente está cumpliendo con su trabajo de combatir y castigar la corrupción e impunidad, es un servicio gubernamental que merecen los tamaulipecos para que se liberen de los servidores públicos y ex funcionarios “pillos”, gandallas, abusivos, irresponsables e infractores de la Ley.
Varios ex funcionarios del Gobierno que encabezó el ex mandatario estatal Egidio Torre Cantú, andan temerosos, nerviosos y hasta con la enfermedad denominada Vitiligo o Leucodemia que se refleja con machas blancas en la piel, dado que se encuentran bajo investigación por no presentar su declaración patrimonial de conclusión y podrían ser inhabilitados del servicio público por no dar cumplimiento a esta disposición legal.
La contraloría Gubernamental a cargo de Mario Soria Landero, investiga a 63 ex funcionarios de la administración estatal que encabezó el ex gobernador Egidio Torre Cantú, por no presentar su declaración patrimonial de conclusión y dejaron en la duda la cuantía de sus bienes al finalizar su responsabilidad.
La citada dependencia gubernamental envió los oficios a los Órganos Internos de Control, para inicio de procedimiento en contra de esos ex servidores públicos omisos.
El funcionario Mario Soria, dijo que se está llevando a cabo la investigación por presunta responsabilidad, requiriendo al declarante cumplir con la citada obligación, para resolver y en caso de no atender el llamado aplicar la sanción correspondiente por parte del Órgano Interno de Control.
Los ex y servidores públicos incumplidos, desobligados y rebeldes que no presenten su declaración, se les aplicará la inhabilitación desde 3 meses a un año, según lo establece la Ley de responsabilidades Administrativas.
La ley debería ser más estricta con los ex servidores públicos y funcionarios que no rindan su declaración patrimonial, pues una simple inhabilitación por ese tiempo no es suficiente, es necesario una modificación a la legislación para que sean procesados y llevados a la fresca cárcel, porque se desconoce si aumentaron sus bienes y si son de procedencia lícita.
En otro asunto, Carlos García González y Gerardo Peña Flores, se reintegrarán este fin de semana al servicio público estatal, luego de haber solicitado licencia a sus respectivos puestos para participar en las pasadas campañas políticas electorales.
Peña Flores, será reinstalado en la Secretaría de Bienestar Social en Tamaulipas, cargo al que renunció el pasado 26 de marzo.
Mientras que Carlos García González, continuará con su licencia que solicitó al Congreso del Estado desde el 31 de enero, para ir en busca de la alcaldía de Matamoros.
García González, perdió la elección y atenderá la invitación para asumir la titularidad de la Secretaría de Desarrollo Económico en Tamaulipas.
Peña Flores y García González, comenzarán a trabajar en la Secretaría de Bienestar Social y de Desarrollo Económico, respectivamente, a partir de este jueves.
La suerte ha favorecido a don Glafiro Salinas Mendiola, pues ya nadie le hace sombra y seguirá como “pastor” del Congreso de Tamaulipas, en donde, por cierto, sigue imperando el desorden, la improductividad, la desatención a la ciudadanía, el burocratismo, la elaboración de leyes sin importancia y el rezago en las iniciativas.
Glafiro, es buen político y excelente ser humano, pero tiene que ser más estricto, porque sólo, difícilmente puede dar los resultados que exigen los tamaulipecos.
Tiene que poner a trabajar a todos los diputados y a los directores de los diferentes departamentos que se mantienen echados en la hamaca contando el dinero de su buen sueldo.
A Glafiro, se le ve activo, con disposición de resolver las demandas sociales, atiende a la gente en su oficina de gestoría y desahoga los asuntos de su competencia en la Junta de Coordinación Política, sin embargo, su buena labor no se conoce, porque no se difunde, al tener, desafortunadamente para su causa un deficiente y vago equipo de trabajo de comunicación social.
Por otro lado, los ciudadanos están esperando una respuesta a su demanda de solución al desabasto de agua potable, ya que la deficiencia de este servicio les ha generado gran cantidad de problemas para realizar sus actividades diarias.
Lo más lamentable es que ninguna autoridad ha emitido información precisa sobre la falta del vital líquido y esto está generando la inconformidad de miles de ciudadanos que puede derivar el surgimiento de manifestaciones y plantones de protesta para exigir el abasto, al menos sectorizando este servicio.
En colonias, barrios y ejidos no hay agua, sólo en algunos fraccionamientos, lo que ha provocado el malestar de la población.
Se ha estado abasteciendo de agua a las colonias que se encuentran en la parte alta de la ciudad a través de pipas, por no son suficientes para atender la demanda de miles de habitantes de ese sector.
Lo que más está molestando a la gente es que pese a no tener agua en las llaves les aplican cobros de varios miles de pesos.
La población asegura que sí hay agua en la Presa Vicente Guerrero, pero los funcionarios no quieren invertir en obras para traer el agua, porque el dinero lo destinan a otras actividades.
El dato: El diputado local del PANAL Rogelio Arellano Banda, tanto andar de meretriz y no ha aprendido a bailar, esto al ponerse a las patadas con el monstruo magisterial, tras considerar que no sería sano que Elba Esther Gordillo Morales, regrese al SNTE. Otro traidor y desleal que muerde la mano a quien le ha dado de comer.