LUPITA TORRES / LA RED DE ALTAMIRA
TAMPICO.- Con el propósito de hacer frente a la cuesta de enero que los comerciantes prevén que se extienda hasta febrero del 2022, éstos solicitan a la autoridad la reducción de impuestos pues son estas obligaciones las que merman considerablemente su reactivación para continuar brindando el servicio pero principalmente, conservando los empleos.
Al respecto Reyes González del Ángel, presidente de la Asociación de Restaurantes y Alimentos Condimentados de la Zona Sur, enfatizó que “el mes de enero aún es más fuerte, pero la cuesta de enero se va a extender hasta el mes de febrero”pues aún y cuando en los primeros días del año continúan las fiestas relacionadas con el Día de Reyes, entre otras celebraciones, en otros negocios existen aún ventas pero por lo que se refiere a febrero y los que le siguen, la actividad comercial se viene abajo.
Por lo tanto, una de las exigencias de los empresarios locales es que las administraciones de la conurbación bajen su carga de impuestos, que sean más empáticos con los prestadores de servicio, ya que la mayoría no ha podido recuperarse debido a la pandemia que continúa vigente.
Reyes González se refirió al caso concreto de Protección Civil que demanda varios rubros a cumplir para realizar su actividad comercial.
“Las autoridades sean más comprensivas, que si debemos tener cinco extintores en el negocio, primero nos den oportunidad de poner tres y luego, después de un tiempo, los otros dos”.
Por lo que se refiere a los permisos, pidió también que sean más comprensibles incluso para la construcción, ya que los nuevos negocios le van a dar más economía a la zona en estos tiempos complicados que requieren de la generación de empleos.
El empresario restaurantero indicó que los incrementos que se registraron a finales del 2021 han golpeado su ejercicio y que es complicado saber cuáles otros vienen para este inicio del 2022, pero ellos no se pueden aventurar a continuar con una baja productividad y por lo que la única estrategia es apretarse el cinturón y no mantener los precios al público.
“La única estrategia que queda es ajustarse el cinturón, porque aunque aumenten los productos o servicios nosotros no podemos aumentar o si no los clientes se van a ir”.
Otra medida a implementar son las promociones, que asegura, les puedan ayudar a atraer clientes mientras la economía se recupera, por lo que la idea es mantener los precios y ofrecer un extra al consumidor que en la medida de lo posible, sigue fiel a los negocios a pesar de la pandemia.