LUPITA TORRES / LA RED DE ALTAMIRA
TAMPICO.- Sacerdotes de toda la República Mexicana se reúnen para abordar el tema de los gastos médicos mayores que se les otorga por parte de la Conferencia Episcopal que tuvo a bien crear este organismo hace más de 50 años para apoyar a los sacerdotes enfermos. En la Diócesis de Tampico son 105 padres que se ven beneficiados.
Acerca del tema informó el padre Silverio Martínez, quien participa en esta actividad desde hace 15 años dentro del organismo que ahora se denomina OCEAS que congrega a presbíteros de diferentes partes de la república que tienen esa encomienda para sus zonas.
“El seguro de gastos médicos mayores nos cubre una cantidad de 200 mil pesos en un primer momento, más 300 mil pesos con un coaseguro de 20 %, de tal manera que cuando un sacerdote gasta 500 mil esta aseguradora nos cubre 440 mil”.
Manifestó que poco a poco van viendo la posibilidad de que todos los sacerdotes puedan tener la opción de otro servicio médico como Seguro Social, aunque hasta este momento no todos lo tienen y que son 105 sacerdotes están cubiertos con el Seguro de Gastos Médicos Mayores de la Diócesis de Tampico, que comprende el sur del estado de Tamaulipas desde Gómez Farías, Antiguo y Nuevo Morelos, Ocampo, Mante, Xicoténcatl, González, Aldama, Tampico, Madero y Altamira, región que atiende el obispo Armando Álvarez Cano.
Señaló que al mismo tiempo de esta reunión para ver por la salud de sus compañeros sacerdotes, otro grupo aún más numeroso se fue para San Juan de los Lagos a los ejercicios espirituales, pero él no pudo ir debido a que esta reunión es más importante.
Sobre la edad de retiro para los integrantes de la grey católica, explicó que no es precisamente que se retiren, pero el derecho canónico invita a que los obispos, sobre todo a los 75 años, dejen su responsabilidad y es una recomendación para sacerdotes, aunque algunos se tardan un poco más como en el caso del padre Carlos Ángeles que estuvo mucho tiempo en el Sagrado Corazón de Madero, el padre Víctor Carranza de Tampico, el padre Morlet que estuvo en San José y el obispo emérito Rafael Gallardo, que tiene 92 años de edad que reciben una pensión para apoyarse.