EN CUESTIÓN DE LA SALUD MENTAL
“A la mejor puede ayudar a nivel económico, de hecho, habría un impuesto especial como en el caso del alcohol y el tabaco, yo creo que a nivel económico y de control podría verse un beneficio, pero a nivel de salud iríamos hacia atrás”.
LUPITA TORRES / LA RED DE ALTAMIRA
ZONA CONURBADA.- En cuestión de la salud mental, el uso lúdico de la mariguana representa sin duda un retroceso, sin embargo, es considerado que su aprobación dejará un beneficio económico la aprobación toda vez que se le aplicará un impuesto especial por su comercialización.
Al respecto opinó Jorge Ávalos Castelán, director del Centro de Integración Juvenil en Tampico.
Dijo que ellos ven más a futuro, enfocándose en las afectaciones que habría en la salud mental porque es una sustancia que tiene unas características distintas a otras que a lo mejor han tenido una restricción o una prohibición.
“A la mejor puede ayudar a nivel económico, de hecho, habría un impuesto especial como en el caso del alcohol y el tabaco, yo creo que a nivel económico y de control podría verse un beneficio, pero a nivel de salud iríamos hacia atrás”.
Expresó que se ha dicho que habrá un impuesto especial para apoyar a programas que beneficien a las personas que en un momento dado se vean afectadas por el consumo de mariguana, pero si actualmente son 120 Centros de Integración Juvenil en el país, van a tener que triplicar la cantidad a largo plazo para poder atender a todas las afectaciones que se van a venir por este asunto porque así se ha visto en el alcohol y el tabaco que son sustancias psicoactivas o como se ha visto con el medicamento controlado.
“A largo plazo vamos a tener pacientes o la mayor cantidad de pacientes con problemas de concentración, pérdida de memoria y brotes psicóticos parecidos a la esquizofrenia, la depresión y ansiedad, problemas de insomnio, y las personas va disminuir su tolerancia a frustrarse, van a estar relajados, pero cuando no tengan la dosis se van a irritar y no sabemos hasta qué grado vaya a ser esa irritación, y como es fumada como en el tabaco va haber una mayor cantidad de personas con problemas pulmonares, y con el COVID es uno de los sistemas que nos tenemos que cuidar”.
Reiteró que a nivel de salud mental es un retroceso esta aprobación del uso lúdico de la mariguana.
Explicó que algo que se produce con la mariguana en el paciente es algo que se llama anosognocia, que es una enfermedad que produce dificultad para darte cuenta que estas enfermo.
“A un adicto le cuesta mucho trabajo darse cuenta que está viviendo una enfermedad, aunque se lo diga su papá, su mamá, su esposa, su hermano, dirá que no le hace daño, pero la familia verá que es irritable, ha tenido accidentes, entre otros problemas por lo que esta denominación psiquiátrica es una incapacidad por la negación de que se está enfermo, por lo que el primer paso para dejar la dependencia es tomar consciencia de lo que le está ocurriendo”.
Hizo referencia a que se tiene la experiencia del alcohol y el tabaco, que en la actualidad todavía son problemas de salud, y que contribuyen al desarrollo de otro tipo de enfermedades o afectaciones en el organismo.
“Entonces la mariguana que tiene un efecto directo en el sistema nervioso central, no todos los cerebros o individuos reaccionan de la misma forma, algunos dicen que no les pasa nada, pero su metabolismo es distinto, pero otros lo fuman y se enganchan y desarrollan una adicción”.
Indicó que los niveles de fortaleza a nivel hormonal como emocional son distintos, por lo que es como querer darle a las moscas con una pistola, no saben de qué manera la persona le va atinar y va a desarrollar una afectación.
Asimismo, señaló que hay daños a corto plazo como también reacciones que las personas pueden ver positivas también a corto plazo, como la relajación, etc., pero a largo plazo tendrá el individuo problemas de memoria y el síndrome amotivacional, que ocurre en los pacientes de mariguana que desarrollan una adicción y que consiste en que va disminuyendo la capacidad de cumplir metas y objetivos.