Javier Claudio / LA RED DE ALTAMIRA
NUEVO LAREDO.- Con el valor a cuestas y la esperanza de que se les haga justicia, cinco extrabajadores de la Maquiladora Lobo sostienen reabierto el caso luego de integrar una demanda para reclamar sus derechos ante la Junta de Conciliación y Arbitraje.
La negra historia que pone en tela de duda el sindicato, data del mes de marzo del 2010 cuando luego de largos meses de mostrar una crisis económica, 130 empleados quedaron sin liquidación en un hecho que ellos calificaron como “madruguete” al ser desalojada súbitamente la empresa de maquinaria y huir de la ciudad.
De acuerdo a los datos que obran en el expediente de demanda del Sindicato Nacional de Infraestructura (SNI), la Maquiladora Lobo era propiedad del Kirk Brandon Wolf, residente de San Antonio Texas y daba trabajo a 130 empleados.
En una aparente baja de producción, crisis económica y al no poder enfrentar los gastos, prefirió huir de la ciudad y desalojar el inmueble en horas de la madrugada para evadir el pago de indemnización.
“Hemos iniciado su defensa legal ante las autoridades de la Junta de Conciliación y Arbitraje de quien tenemos confianza responderán, para la recuperación de la indemnización que les fueron incumplidas a los trabajadores en flagrante violación a la Ley Federal de Trabajo”, comentó entonces el dirigente del SIN, Santos Francisco Hernández Aguilar.
De acuerdo a la denuncia presentada y que se mantiene vigente, se inmiscuye en el delito al Sindicato de Trabajadores de la Industria Maquiladora, por su desistimiento de intervenir aun cuando se le demostró había antecedentes de quiebra y el riesgo de abandonar la ciudad la empresa y dejará sin indemnización a los 130 trabajadores.
“Los trabajadores insisten en complicidad de las delegadas de la Maquiladora Lobo Guadalupe Ávalos Martínez y Amparo Cárdenas Tobías, pues no obstante haber sido advertidas de la probabilidad de que huyera el propietario, extrañamente desoyeron y no tomaron medida de vigilancia en el inmueble”, según consta en la demanda.
En el mismo documento de demanda se hace constar también sobre la presunta complicidad del dirigente del Sindicato de Maquiladoras, Luís Eduardo Martínez López, pues el dueño tuvo el tiempo suficiente para llevar los ahorros, nómina y garantías sindicales.