PILAR DANTÉS / LA RED DE ALTAMIRA
TAMPICO.- La violencia contra la mujer sigue siendo uno de los retos sociales a vencer pues se presentan al menos tres casos por semana en Tampico por lo que es necesario la instalación de las “Casas Violeta” que brindan resguardo a las víctimas de agresión al interior del seno familiar.
La regidora Beatriz Rodríguez Tarabelsi, se refirió a uno de estos albergues que fue autorizado ya para el vecino municipio de Altamira donde según se dio a conocer, cuentan con una elevada incidencia de abusos contra las féminas.
“Tengo entendido que allá se abrió porque Altamira ocupa el primer lugar en el índice de violencia familiar por lo que era urgente abrirlo en Altamira”.
Mencionó que para la apertura de la “cada violeta” en Tampico, aun no hay fecha, pero siguen atendiendo los casos con el apoyo de la Guardia Estatal.
“Al no haber este apoyo (casas violeta) se está actuando, separar del lugar de los hechos, no sabemos a qué lugar las llevan, eso siempre se ha mantenido confidencial para protegerlas y vamos a esperar que ya anuncien pronto la apertura”.
Indicó que van en aumento los casos de violencia contra la mujer pues en menos de ocho días recibió ya tres denuncias pero que ha recibido muy buena respuesta sobre todo de parte del Sistema DIF sobre todo para salvar a los niños de la situación.
La Presidenta de la Comisión de Equidad de Género en el Cabildo Porteño dijo que lo más común es que el sujeto ejerza la violencia económica para alimentos y ahora que vienen las clases, no aportan para la compra de útiles, uniformes y demás que se requiere y eso detona las agresiones y son niños menores de 12 años los más involucrados.
En cuanto a las mujeres, indicó que son menores de 40 años, que dependen económicamente de la pareja por lo que hizo el exhorto para que se activen.
“Las invitamos a participar en las becas que estamos repartiendo en el Instituto de la Mujer para que puedan aprender y emprender un oficio para que puedan independizarse o aportar a la economía familiar porque no sabemos, a veces denuncian los casos, pero regresan al hogar y ahí si es contribuir con el marido a reforzar la economía”.