Humberto Gutiérrez
Se acabarán las inversiones en Nuevo León y la frontera?
La calificadora FITCH dice en un comunicado que Trump es un peligro para el mundo globalizado. Reitero lo que comenté ayer, real y objetiva la información para tranquilidad de todos, Trump tendrá que convencer al Congreso para realizar cualquier cambio en las partidas presupuestales y para acordar otros impuestos sobre todo a las importaciones de México.
Me refiero a la construcción del muro y la creación de impuesto a las importaciones de México.
Y eso tardará varios meses, si es que no lo desconocen antes, como algunas voces que no se esconden para exponer deliberadamente, algunos republicanos de alto rango ya no quieren nada con el presidente.
Abordó el tema Trump, porque de alguna manera sus propuestas nos va afectar como tamaulipecos: inmigración, impuesto a los productos mexicanos, el muro, el trasiego de drogas y de órganos humanos, el tráfico de personas.
Hay mucho que hacer y comentar de sus implicaciones en nuestro estado, principalmente en los municipios fronterizos.
Ando en Estados Unidos desde hace 10 días, conociendo a un miembro más de mi familia, encuentro noticias de trascendencia para la vida mexicana y de Tamaulipas.
Como dice la gente que sabe de economía de las dos naciones con quienes platiqué, jóvenes capaces, hombres y mujeres inteligentes que no encontraron cabida en México, que no encontraron condiciones para exponer su talento en la iniciativa privada y menos pública.
Uno es de Jalisco, de Tamaulipas, Querétaro, Nuevo León y Chihuahua.
Me dicen:
“Lo que sí está afectando y parecer que ustedes no se dan cuenta, es la autorización para fumar marihuana para uso recreativo, puede cambiar el flujo de capital en algunas regiones que ahora se ven beneficiadas.”
Esta información pasa por un oído y salir por otro sin causar impacto.
Por desconocimiento o por obesidad mental.
Se sabe que el lavado de dinero producto de este fenómeno social alcanza hasta hace tres años, 25 mil millones de dólares, que transitan fuera del sistema financiero y que se invierten en bienes raíces, principalmente en el vecino estado de Nuevo León, Jalisco, y ahora la Cd. de México y en los municipios fronterizos.
Me dicen los amigos jóvenes, “la relación de EU y México cambiará en la medida en que otros estados volteen a ver a Colorado”.
EL CASO COLORADO
El estado de Colorado obtuvo casi 200 millones de dólares en ingresos tributarios el año pasado gracias a sus 1.300 millones de dólares en ingresos por marihuana. A cuatro años legalizar la marihuana recreativa en 2012 junto al estado de Washington que produjo 275 millones de dólares el año pasado de impuestos locales.
Es el presupuesto de las ciudades de Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros ¡¡ juntos ¡¡¡.
Esta “ industria” ha estado creciendo al 30% anual partiendo de 700 millones en ventas al primer año.
Imaginemos Texas uno de los estados más poblados, o California, Nuevo York, Chicago.
“Este dinero es sólo la punta del iceberg. Esperemos que esto sea una llamada de atención para los 48 estados que todavía deciden forzar las ventas de marihuana en el mercado criminal y renunciar a millones de dólares en ingresos fiscales”.
Para este año 2017 se pueden lograr los acuerdos.
Colorado es un ejemplo de cómo la marihuana recreativa legal puede funcionar.
La marihuana ahora se está vendiendo en negocios licenciados, en lugar de salir a comprar a la calle. “Está siendo probado adecuadamente, empaquetado y etiquetado y sólo está siendo vendido a adultos que demuestren su edad. El sistema está funcionando.
Esto supone de alguna manera menos criminalidad en las calles, sobre todo de Tamaulipas y menos inversión en el vecino Nuevo León, Jalisco y la Cd. de México y en los municipios de la frontera norte.
Y si se termina de construir el muro en la frontera de Tamaulipas, los 340 kilómetros de frontera se reducirán a los cruces fronterizos.
Esto habrá de redundar en menos crimen y más paz social.
El muro o la valla fronteriza entre Tamaulipas y Texas está construido en los principales puertos fronterizos, desde Matamoros hasta Reynosa y en Nuevo Laredo.
Desde Díaz Ordaz hasta Nueva Ciudad Guerrero, toda la frontera chica la divide solamente el Rio Bravo.
En la frontera norte se registra más de un millón de cruces legales al día, la mayor cifra del planeta.
De 3,200 km de frontera en 1,135 existe el muro de concreto o la valla con la más alta tecnología en Arizona, Chihuahua, Sonora y Baja California, detectan el mínimo movimiento, señal que llega a los puestos de vigilancia de la patrulla.
En la actualidad EU tiene 21 mil agentes, según reporte elaborado por el Centro Wilson y el Colegio de la Frontera Norte.
Pero ni el muro, valla o cerca y 21 mil agentes fronterizos son suficientes para frenar el apetito por las drogas y otros productos ilegales de los habitantes de EU; siempre encuentran la forma de evadirlos por medio de catapultas, cañones, rampas, drones , sofisticados túneles o con permiso de la autoridad gringa.
“La historia nos ha dicho insistentemente que cuando se crean ese tipo de barreras, lo único que pasa es que es más costoso cruzarla, pero si los incentivos para cruzarla siguen excediendo ese costo, va a seguir ocurriendo”.
Hay estudios que consideran que pagan “justos por pecadores” por una política mal pensada, como la del muro.
“Las soluciones no son físicas sino que tienen que basarse en la cooperación, mayor coordinación, confianza y colaboración entre las autoridades locales, y tienen que basarse en el uso de tecnología e intercambio de información”.
Este fenómeno, tiene sus rutas y métodos a la mano, principalmente en puntos como Tijuana, Mexicali, Nogales, Ciudad Juárez, Piedras Negras, Nuevo Laredo, Reynosa o Matamoros.
Mientras el mercado de la droga crece, la Agencia de Protección Fronteriza de EE.UU., que combate el tráfico ilegal en las fronteras, reportó una baja en los decomisos en lugares como en California, con una reducción del 25% en 2015.
¿Qué hacer?, ¿qué camino tomar?, ¿ a quién dirigirse?, ¿ falta comunicación de la autoridad mexicana?.
Esta reflexión me parece que no está contemplada por los “intelectuales”, o santones del periodismo.