MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA
No se podría entender la crisis de inseguridad que se sufre en Tamaulipas, sobre todo en la frontera y Victoria, sin la crisis de inseguridad que adolece en Nuevo León, en ambos estados los grupos del crimen organizado pelean las plazas y también en ambas Entidades los gobernadores minimizan la realidad que les afecta.
Así es mis queridos boes, por allá de los años 2000, era muy común leer a las autoridades de Nuevo León pretextar que los ejecutados que se encontraban en los límites con Tamaulipas, eran en realidad liquidados en tierras cuerudas y tirados en las regias para negar ser parte del problema.
Hoy, no hay forma de que el mismo argumento funcione para los regios, las ejecuciones se han vuelto costumbre, las redes sociales y la prensa regiomontana las visibiliza, a veces con cuerpos aún tibios, pese a la fría respuesta del gobernador SAMUEL GARCÍA, que en eso se parece mucho a su vecino AMÉRICO VILLARREAL ANAYA.
Ejemplos muchos; ayer y hoy y desde hace un mes Reynosa, Río Bravo, San Fernando y Victoria han tenido hechos de violencia como: balaceras, persecuciones, ejecutados, ataques a la Guardia Estatal, ataques a los soldados, asaltos en carreteras, despojo de vehículos, desaparecidos y el discurso de AMÉRICO es de que vamos bien, que se han bajado los índices de violencia, lo que es mentira.
En Nuevo León, principalmente en el norte, en los municipios que colindan con la de Tamaulipas y en la zona metropolitana de Monterrey, la cuota promedio de ejecuciones es de 4 o 5 por jornada.
El miércoles los homicidios dolosos; es decir los ejecutados fueron 11, el doble de lo que se tiene en los días más o menos normales.
Este jueves, entre otros hechos violentos, por la madrugada se encontraron 3 cuerpos colgados de un puente vehicular en la carretera a Colombia y esta tarde se dio a conocer que en la carretera rumbo a Reynosa se encontró una maleta con el cuerpo de una mujer ejecutada.
Pese a todo, el gobernador SAMUEL GARCÍA dijo este jueves que el saldo de 11 muertos de ayer miércoles fue solo “un mal día”
“Nuestros números es que vamos muy bien, los índices, inclusive este mes la Fiscalía ya reportó que en delitos de alto impacto tenemos 15 por ciento menos, entonces desconozco y no comparto que se recrudece”, dijo GARCÍA
“Y no se vale que por un mal día contaminemos lo que se ha hecho en seis meses”.
La realidad es que de acuerdo con el conteo de homicidios dolosos, tanto Tamaulipas como Nuevo León registran incrementos si se compara el año pasado con el actual.
Datos del Secretariado Ejecutivo Nacional de Seguridad Pública indican que mientras en el 2022 para estas fechas se habían cometido en Nuevo León 761 homicidios dolosos, ahora ya van 864; más de cien de diferencia.
En Tamaulipas, las mismas estadísticas dicen que mientras en el 2022 se habían cometido 262 homicidios dolosos, este año ya van 321; es decir 60 más.
En términos porcentuales; en Nuevo León los homicidios dolosos han subido 14 por ciento, mientras que en Tamaulipas se han incrementado el 23 por ciento.
Entonces, los discursos de AMÉRICO y de SAMUEL de vamos muy bien, fue un día difícil y la estrategia, muy gastada por cierto, de culpar a la prensa de amarillista por decir la verdad, no funciona contra la inseguridad.
Ambos, AMÉRICO y SAMUEL no tienen, o por lo menos así se ve, a la seguridad entre las prioridades de sus gobiernos.
AMÉRICO está dedicado a apoyar a CLAUDIA SHEIMBAUM para obtener la candidatura de Morena a la presidencia y a protagonizar eventos de fotografías, en los que se prometen obras, se pinta un fututo de Tamaulipas que no se va a hacer realidad, porque no hay dinero para hacerlo.
SAMUEL, es cierto, está dedicado a llevar a su tierra inversiones multimillonarias en dólares, como la de Tesla, pero también distrae su tiempo en la grilla futurista, porque quiere ser presidente de la República.
Ambos están fracasando en el tema de seguridad, porque les interesa más la política electoral que la política del bien común, el regio quiere mucho más poder y el de Tamaulipas no sabe qué hacer con el poder que ya tiene.
En ambos estados el crimen organizado se fortalece, mientras ellos miran hacia otro lado, en medio los de a pie, los ciudadanos comunes, están poniendo la cuota de muerte.