MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA
Tamaulipas ha vivido en las últimas horas episodios de terror, que se agravan con la ceguera cómplice del gobierno morenista que encabeza AMÉRICO VILLARREAL ANAYA.
Así es mis queridos boes, ya no son hechos aislados, la violencia se ha desatado en la zona del Valle de San Fernando, en Llera y no ha cesado en la frontera, donde los grupos que se disputan las plazas tienen vía libre para convertir las calles en campos de batalla.
Este martes, mientras el gobierno de AMÉRICO sigue en ‘babaría’, las imágenes de al menos 8 cuerpos tirados en San Fernando le daban la vuelta a los grupos de was, las páginas de alertas de riesgo y otras dedicadas a la cobertura de la violencia.
La refriega, dicen, comenzó de madrugada en la zona y se extendió hasta la costa, el laberinto del sistema lagunario, sin que autoridad alguna se diera por enterada.
Bloqueos, ponchallantas rumbo a la Laguna, caos y lo de siempre, impunidad para unos y terror para todos
No era la única región de Tamaulipas que estaba bajo fuego en la madrugada, en Llera los pobladores daban cuenta de persecuciones y balaceras.
Por la tarde la ribereña donde nunca ha estado en paz, los reportes indicaban presencia de ponchallantas y diversas zonas de riesgo.
También por la madrugada en la carretera San Fernando a Reynosa un autobús de la línea Omnibus de México fue baleado y sus pasajeros asaltados por un grupo armado.
La historia era la segunda del día, porque a eso de las 10 de la mañana, en la colonia Ribereña de Reynosa le había tocado la misma suerte de balas y asalto a los pasajeros de otro bus de la misma empresa.
Ya por la tarde noche, le tocó a un Transportes Frontera ser baleado y asaltado saliendo de la central camionera, también de Reynosa fue detenido a punta de bala y otra vez el asalto.
No, no puede AMÉRICO y su incapaz gabinete de seguridad seguir culpando al pasado, mientras las víctimas son los que pagan sus jugosos salarios y les permiten darse una vida de virreyes, se mueven en camionetas blindadas y traen a su servicio una docena de guaruras.
Tienen más de un año en el gobierno, se dicen amigos del presidente de la República, aseguran estar transformado a Tamaulipas y a todo eso le urgen pruebas que vayan mucho más allá de los boletines oficiales cargados de mentiras triunfalistas de que todo va mucho mejor.
Las cosas van de mal en peor, porque la delincuencia organizada se dio cuenta de que en Tamaulipas no hay Estado, no hay mando, no hay voluntad, ni trabajo para hacerles frente y por el contrario, la incapacidad oficial les ayuda a los malos minimizando el problema que crece y crece.
Parece de risa loca, pero es gravísimo, en Tamaulipas ni siquiera los muertos están seguros, porque resulta que el montón de cuerpos, 8 según los reportes, que se dieron en San Fernando, para cuando llegó la Guardia Estatal, ya que no había peligro claro, no había rastro.
Muy conveniente para el gobierno estatal de AMÉRICO, porque sin cuerpos no hay muertos, la cifra no se incrementa y les da chance de seguir mintiendo.
Es muy grave que la autoridad no se haga presente en las zonas de balaceras al momento en que ocurren, pero es mucho más grave que no alerten a la población que nada tiene que ver en el conflicto entre bandas, para que se proteja y proteja a los suyos.
A eso se le llama omisión y desmiente cualquier apapacho presidencial y los aplausos pagados de analistas que un día si y otro también hablan de lo bien que le va a Tamaulipas en el tema de seguridad y le atribuyen la falsa mejoría al humanismo y liderazgo de un AMÉRICO VILLARREAL realmente ausente, sospechosamente ausente.
¿Qué falta para que AVA y los suyos reconozcan que se está agravado el problema de la violencia y actúen en consecuencia?, no lo sé, pero esperemos que no tenga que ocurrir una tragedia mayor.
El tema es que el país no está mejor, hace unos días un grupo de pobladores hartos de los cobros de piso y ante un aumento planteado por una célula del crimen organizado en el Edomex se les enfrentaron y el saldo fue de 15 muertos y varios heridos.
Ahí tampoco llegó la autoridad para auxiliar, sino hasta que ya no había peligro.
Reitero no hay Estado, el poder de las armas, el poder de la inteligencia institucional, el gobierno, se está usando contra los ciudadanos de bien, mientras a los malos se les deja actuar a sus anchas…. ¿Hasta cuándo despertará el México bronco con el que nos espantó AMLO en el 2018?