
Por Javier Claudio
- – Destaca la petición de que existan solamente 32 Senadores y no los 122
- – Basta de gastos de diputados federales, mismos que paga el ciudadano
- – La percepción de inseguridad de la ciudadanía incrementó 5.9 por ciento
Claro que sí. – De que el político vive de nuestros recursos, vive y por largos sexenios se ha criticado hasta el hastío la cómoda forma de vivir de diputados federales y senadores, donde destaca la demanda que disminuya la cantidad de Diputados Federales, esto es de 500 a 300 dado el fuerte y hasta descarado gasto que representan, por ejemplo; 77 mil 888 pesos por Dieta, 45 mil 786 pesos por Asistencia Legislativa y 28 mil 772 por Gestión y Atención Ciudadana. Esto, bien podría ser mejor invertido.
Claridades. – Continuemos implorando porque comience a tomar fuerza entre la sociedad civil una mayor participación ciudadana en la decisión y actuación de nuestros gobernantes, como la acción más contundente e inteligente para corregir y hacer mejor las cosas. Hablamos de hacer efectiva nuestra voluntad a cambio de nuestro voto en cada una de las elecciones. Suena hartamente bien y es cuestión de organizarse e ir al hecho y no dejar que otros decidan por nosotros como sucedió con los diputados y ese inolvidable sí traidor para la aprobación del 16 por ciento al IVA en la frontera.
Clarín. – Y la reflexión ciudadana observa otra restricción a los diputados federales, pues debe usted saber que estos, además de contar con un seguro de gastos médicos mayores, cuya suma asegurada básica es de hasta mil 500 salarios mínimos generales mensuales vigentes en el Distrito Federal, aguinaldo equivalente a 40 días de su dieta, cuentan también con un fondo de ahorro, que consiste de la aportación de hasta 12% de su dieta bruta mensual; seguro colectivo de vida y gastos funerarios.
Aclarando. – Otro de los llamados gastos superfluos y que salen de nuestros bolsillos es el gasto del personal de la Cámara de Diputados, donde se observa que el Jefe de Departamento gana entre 18 mil 668 y 31 mil 560 pesos, el Subdirector, entre 31 mil 801 y 51 mil 900 pesos; el Director de Área devenga, entre 53 mil 109 y 83 mil 789 pesos; el director general de cada área que labora a interior de la Cámara Baja, gana entre 91 mil 203 y 119 mil 220 pesos; Contralor 122 mil 038 pesos; Secretario, 136 mil 832 pesos y el Secretario General 157 mil 702 pesos.
Claro que no. – La inconformidad del ciudadano repunta también al demandar menos Senadores, pues todos y cada uno de sus exorbitantes gastos nos cuestan a nosotros, sí, a los ciudadanos. Por lo tanto seria congruente y muy justo que la cantidad de Senadores pasara de 122 a 32, solamente. ¿Por qué no? Esto es, que uno represente a cada estado del país e invariablemente de responsabilizarlos para que rindan informes y cuentas al pueblo. Incongruente y hasta insultante que a nadie rindan cuentas.
Claroscuro. – Resulta por demás ofensivo al respeto que merecemos como ciudadano que los Senadores obtienen 146 mil pesos mensuales cada uno más prestaciones. El agobio es total para el ciudadano que vive al día, presionado por el gasto, deudas, inflación, una Secretaría de Hacienda en feroz asedio hacia al tributario cautivo, que es solamente el 40 por ciento del gran total y que implica que el restante 60 por ciento no paga o séase es evasor… ¡es delincuente fiscal!
Clarificando. – El llamado para tener mayor participación ciudadana, deberá romper todos los moldes y viejos sistemas, pues deberá imponerse con la razón y la ley en la mano. Es injusto que mientras los Diputados Federales y Senadores recurren a los seguros médicos privados, el ciudadano común haga largas filas con su enfermedad a cuestas, en la espera de ser atendidos en los desabastecidos I
Sabía usted que. – La percepción de inseguridad en las principales ciudades del país continuó su tendencia al alza hasta registrar, de nueva cuenta, un record histórico, de acuerdo con los resultados del decimonoveno levantamiento de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana, realizada por INEGI. Durante la primera quincena del marzo del 2018, el 76.8 por ciento de la población de 18 años y más consideró que vivir en su ciudad es inseguro. Dicho porcentaje es el más alto del que se tenga registro desde Septiembre de 2013, cuando se inició la encuesta.