LUPITA TORRES / LA RED DE ALTAMIRA
TAMPICO.- Domingo desquiciante en el que además de ser amables con los clientes que a la víspera, abarrotaron las tiendas en busca uniformes y útiles escolares, los empleados debían estar al pendiente para obstaculizar cualquier intento de los amantes de lo ajeno que suelen confundirse entre la multitud.
Evidentemente tensionado por la gran cantidad de personas que entraban y salían del lugar, el gerente una de las tiendas más socorridas por su ubicación en el centro histórico y por su tradición en el surtido, corría de un lugar a otro para atender quejas, sugerencias, solicitudes y girar instrucciones al personal.
En menos de una hora, fueron voceados encargados de los diferentes departamentos porque faltaba una etiqueta, porque no estaba en su lugar o porque algún pasado de listo ya se había guardado un perfume y quería salir tan campante del negocio, sin pagarlo, pero los centinelas apostados justo en el acceso principal, lo lograron interceptar para invitarle a pasar por el área de cajas.
Papás con rostro indescifrable, parados en zonas estratégicas para no entorpecer el tráfico, en espera de que la familia decidiera la compra; mujeres queriendo arrasar con la moda que al final, dejaban de lado para llenar el canasto con cuadernos, lápices, plumas y demás suministros escolares, niños y adolescentes con cara de fastidio y jovencitas estresadas por la multitud y las largas filas para pagar, era el común denominador en este lugar y muchos otros de la zona centro.
Así fue el domingo previo al inicio del ciclo escolar 2022-2023, donde también se vio a familias de turistas recorriendo el primer cuadro de la ciudad y el mercado municipal; a policías realizando recorridos de vigilancia, cantantes urbanos haciéndolo bien, vendedores ambulantes ofreciendo sus diversos productos, automóviles particulares y de servicio público invadiendo las calles. El ajetreo normal de un día antes de clases.
Y la queja generalizada entre los clientes: ¡qué caro está todo! Un regreso a la escuela en semáforo amarillo, donde la clave está en adoptar las medidas sanitarias para prevenir que esto del Covid se vuelva a salir de control.