Javier Claudio / LA RED DE ALTAMIRA
NUEVO LAREDO.- No hay defensa inmediata ante las fallas en energía eléctrica en diversos sectores de la ciudad, las que según la Comisión Federal de Electricidad (CFE) son efecto de la variante carga de consumo por parte de usuarios y que no es reportada.
De acuerdo a la información recabada en las áreas de Suministro y Distribución CFE-Nuevo Laredo, la recurrencia de apagones en diversos puntos de la ciudad –ante lo más intenso de la temporada de calor–, se debe principalmente a que gran parte de carga no es reportada por usuarios.
“Esto es que se pudiera tener un mejor control de carga en los sectores, si cada usuario establecería o reportara la cantidad de aparatos que se tiene o se dan de alta en el hogar”, comentó el empleado.
Se hizo saber que la empresa se mantiene en un estado de alerta a fin de atender las llamadas de usuarios que reporten la suspensión de la energía eléctrica, aunque en ocasiones era insuficiente la atención por la cantidad de reportes.
El uso de aires acondicionados, como atenuante al intenso calor de temporada, propicia que despunte drásticamente la demanda de energía eléctrica y provoca apagones como defensa inmediata del sistema de conducción, mayormente sino son reportados.
“Tenemos una carga estimada de envío a cada uno de los sectores de la ciudad. Sin embargo, en muchos de los casos ha sido rebasada, debido a que los usuarios aumentaron la cantidad de aparatos de aire acondicionado”, dijo el técnico de operaciones.
Aseguró que la CFE ha insistido entre usuarios a reportar toda adquisición de aparatos de aires acondicionados en sus domicilios o negocios a fin de evitar sobrecargas por la demanda de energía en los sectores.
“Es importante reportar el incremento de carga por motivos de adquirir equipos de acondicionamiento (climas), o para soportar el incremento normal de la carga en los domicilios a través de los años y así evitar fallas de servicio”, recomendó el entrevistado.
Expresó que esta falta de cuidado afecta la carga conectada, que es la suma de las capacidades eléctricas de todos los aparatos que se tienen en el domicilio, así como también la cantidad de contactos e iluminación con que se cuente en medición de Kilowatts.
“En base a esta carga conectada, al cliente se le elabora un contrato de energía eléctrica y este contempla una cierta demanda eléctrica. Sin embargo, con el paso de los años esta demanda eléctrica se va incrementando en cada domicilio a medida que existe la posibilidad y se van adquiriendo más equipos que requieren del consumo de energía eléctrica llegado el momento en que duplican o triplican lo contratado inicialmente”, detalló.