
Por Raúl Hernández Moreno
El 13 de junio de 2015 entró en vigor la ley electoral de Tamaulipas mediante la cual se autorizó la reelección de los miembros de los ayuntamientos y diputados locales.
Fue una adecuación para empatarla con la Constitución General de la República que con antelación se reformó para permitir la reelección de senadores para que puedan permanecer 12 años, los diputados federales 12 años y los miembros de los ayuntamientos dos períodos, de tres años cada uno.
El artículo 130 de la Constitución de Tamaulipas no precisa que se autoriza la reelección de alcaldes, síndicos y regidores, sino que los engloba bajo el concepto de “miembros de los ayuntamientos”.
Los artículos 185 y 186 del Código Electoral tratan el tema de la reelección. Entre otras cosas precisa que se permitirá una sola reelección, que los candidatos deben separarse 120 días antes de la elección y que solo se permite la reelección participando bajo las siglas del partido por el cual se llegó. La regla es válida para los que llegaron a los ayuntamientos en calidad de independientes.
El registro lo hacen los partidos, de tal manera que alcaldes, síndicos y regidores que aspiren a reelegirse primero deben conseguir la autorización de su partido. Si este se los niega, nada podrán hacer y tendrán que dejar pasar tres años, para poder lanzarse por otro partido o en calidad de independiente.
Ahora bien, como la ley habla de que se pueden reelegir a los miembros de los ayuntamientos, se interpreta que un regidor en activo puede aspirar a ser regidor, síndico o alcalde, en el próximo período. Y lo mismo aplica a síndicos y alcaldes, aunque es poco probable que un alcalde decida buscar ser regidor en el siguiente período.
En el caso de los ayuntamientos en funciones, el alcalde que aspira a reelegirse puede registrarse con los actuales síndicos o regidores, puede llevar a unos cuantos o puede cambiarlos a todos.
En el caso del regidor priista Jesús Valdez Zermeño puede buscar la candidatura a la presidencia municipal en el 2018, previa autorización de su partido. Este es un tema que ya se discutió al interior del PRI y los principales cuadros están de acuerdo en que la posible postulación de Valdez Zermeño como candidato a alcalde sería legal. Insistimos, siempre y cuando el PRI lo avale, y lo mismo ocurre con Yahleel Abdala que puede buscar la reelección como diputada federal, pero no es un tema que ella decida, lo cual alegra a muchos priistas que están decepcionados con su triste papel. Claro, tiene sus seguidores.
Por lo que respecta al PAN, lo más lógico es que decida postular a Enrique Rivas, con le ventaja de que en 2016 obtuvo más de 78 mil votos, le sacó una diferencia de más de 28 mil al PRI y por ser el presidente en funciones su nombre está presente en las mentes de los neolaredenses. Ya está posicionado en el ánimo de los ciudadanos y esa es una ventaja sobre los demás contendientes.