Por: Juan R. de la Sota
El PRI Estatal que, no tan acertadamente dirige el ex diputado local Sergio Guajardo Maldonado, empezó su juego político-electoral rumbo a las elecciones del año 2018, al destapar a los aspirantes a la candidatura al Senado de la República y excluyendo a varios de sus militantes que también han expresado sus deseos de participar como contendientes a ese puesto de elección popular.
En conferencia de prensa ofrecida este lunes en la sede del Comité directivo Estatal del instituto tricolor, el líder del priismo estatal, dio a conocer las aspiraciones para ser candidatos a la Cámara Alta del diputado federal Edgar Malhem Salinas; de la tampiqueña Mercedes del Carmen Guillén Vicente.
Del ex líder estatal del PRI y ex alcalde de Victoria, Enrique Cárdenas del Avellano; del ex candidato a Gobernador Baltazar Hinojosa Ochoa; del diputado local, Alejandro Etienne Llano; Yanin Abdalá y la ex legisladora estatal Monserrat Arcos.
Guajardo, mantiene la misma línea de exclusión e imposición del viejo PRI, al sacar de la lista de aspirantes a militantes populares y reconocidos por la sociedad, como es el caso del Alcalde de Victoria, Oscar Almaraz Smer; aplaudido por su gran capacidad de gestoría ante autoridades federales para traer recursos a su pueblo y su gran trabajo como mandatario municipal a favor de los victorenses.
Así como al líder de la CONALPRI y ex presidente del Congreso de Tamaulipas, Ramiro Ramos Salinas, este último con gran experiencia en el tema legislativo y su mucha relación con los presidentes de los congresos locales de todo el país y a otros destacados integrantes de este partido, entre ellos diputados federales y presidentes municipales, quienes han levantado la mano, pero que mediante una decisión de preferencias Sergio Guajardo, termina con su derecho de aspirar a ese puesto de elección popular.
Son las mismas caras y los mismos nombres, por no decir que es más de lo mismo, son los mismos políticos que han ocupado cargos de representación a nivel federal y nada han hecho por Tamaulipas, por lo que la cantera que aspira a representar al PRI en las próximas elecciones, lo llevarán a la tumba política, de eso no hay duda.
Presentan como aspirantes a un ex candidato a gobernador perdedor, diputados, ex alcaldes y ex funcionarios federales que le han jugado el dedo en la boca a los electores tamaulipecos, al venir y rogarles les den el voto y cuando obtienen el triunfo se olvidan de su territorio y de su pueblo y hasta de su familia, utilizando el puesto sólo para beneficio personal, enriquecerse e incrementar su fortuna.
Los mencionados aspirantes a la Senaduría no son la única opción del PRI, cuenta con más cuadros e incluso jóvenes que han trabajado a favor de su partido y de los diversos sectores sociales, no han sido políticos que han ocupado un puesto para escalar políticamente, sino para trabajar a favor de la gente, no como los aspirantes al Senado que sólo han hecho política y ostentado importantes puestos, no para servir, sino para servirse.
Con el método aplicado por Guajardo y quienes lo mandan, llevan al PRI a una contundente derrota electoral, pues jugarán con la misma cantera y ésta, en su mayoría, no se encuentra en el ánimo del electorado, toda vez que le han mentido a quienes representan o han representado y los están esperando para realizar su dulce venganza.
Se reconoce a los que tienen trabajo político y entre ellos resaltan Enrique Cárdenas del Avellano, Monserrat Arcos y Edgar Melhem, pero del resto sólo se puede decir que han hecho política en la Ciudad de México, donde han andado de barbaros con altos funcionarios federales para que les ayuden a conseguir las candidaturas.
O a caso Mercedes del Carmen Guillén Vicente, Yanin Abdalá, Alejandro Etienne y Baltazar Hinojosa, han recorrido las colonias de Tamaulipas, para escuchar y atender las necesidades de la gente, claro que no y con esto, no son merecedores a aspirar a la candidatura al Senado ni a ningún otro puesto de elección popular, y porque además, sólo en el momento que necesitan el voto, es cuando buscan a la gente y esas sinvergüenzadas ya no se deben permitir ni tolerar.
Dice Guajardo que está recorriendo los municipios para cumplir con la renovación de los comités municipales y que durante esos encuentros con el priismo estatal observa que la gente quiere al PRI, sin embargo, nadie le reclama, objeta ni protesta, porque no quieren problemas, pues ya los conocen como son de represivos y vengativos.
Yo observo un PRI muy débil, un PRI dividido, un PRI opaco, un PRI hundido, un PRI entregado a unos cuantos políticos, un PRI excluyente y un PRI derrotado, por lo que de no ayudarle, alguien que conozca de política y de procesos electorales, a Sergio Guajardo, sin duda, habrá de perder las senadurías, varias diputaciones federales, alcaldías y otros puestos de elección popular.
Reiteró, tal parece que el PRI de Guajardo y su proyecto de trabajo, es llevar al PRI al fracaso y a la tumba política, pues no se ve por ningún lado cómo se recuperen de la aporreada política que hace más de un año le asestó el Partido Acción Nacional, en las elecciones locales.
Sergio Guajardo y su comité estatal del PRI deberán tomar en cuenta a todos los priistas que reúnen los requisitos para ser candidatos a la senaduría, diputaciones, alcaldías y otros cargos de elección popular, porque si no lo hace habrá de perder, otra vez, el juego electoral en el año 2018.
El PRI cambia o perderá más posiciones políticas, esto lo debe tomar muy en cuenta Checo Guajardo. Tal parece que Guajardo trabaja a favor de sus adversarios, como lo ha hecho el PRI, en pasadas competencias políticas electorales, pues no se ve sea una real y auténtica oposición.